Por toda la provincia de Córdoba, y por media España, se han sucedido numerosas concentraciones por los derechos de las mujeres afganas. Bajo la frase de la escritoria Audre Lorde, "No seré una mujer libre mientras siga habiendo mujeres sometidas, incluso cuando sus cadenas sean diferentes a las mías", colectivos feministas han llamado a la participación en estas concentraciones.
En el caso de Córdoba capital, centenares de personas han acudido hasta la céntrica plaza de las Tendillas bajo la convocatoria de la Plataforma Cordobesa Contra la Violencia a las Mujeres, Nosotras Decidimos, la Plataforma Andaluza de Apoyo al Lobby Europeo de Mujeres y Amnistía Internacional.
Pero la capital no ha sido la única. Estas convocatorias se han repetido por toda la geografía cordobesa, con concentraciones también en localidades como Nueva Carteya, Pedro Abad, El Carpio, Espiel, Belalcázar o Carcabuey.
En todos esos actos se ha recordado la complicada situación en la que se encuentran mujeres y niños en Afganistán tras la toma del poder en Kabul por parte de los talibán. A pesar del anuncio del portavoz de la oficina política de los talibanes en Catar, Suhail Shaheen, en el que aseguraba que niñas y mujeres podrán ir a las escuelas y acceder a la educación superior, todos los colectivos han apuntado que ese tono moderado tiene visos de desaparecer una vez la comunidad internacional abandone el territorio.
En los cuatro manifiestos leídos en la concentración de las Tendillas (uno por colectivo), todas las integrantes han pedido a la comunidad internacional que dé asilo a todos los refugiados afganos. Además, han exigido que se pongan todas las herramientas posibles para acabar con la violencia en la zona.
En la concentración estuvieron presentes algunas representantes institucionales, como la alcaldesa accidental y primera teniente de alcalde, Isabel Albás, la delegada de Servicios Sociales, Eva Contador, la portavoz municipal del PSOE, Isabel Ambrosio, o la delegada de Igualdad de la Diputación, Alba Doblas.
