Córdoba, que dejó el miércoles de estar en riesgo por las altas temperaturas tras una ola de calor histórica, volverá este fin de semana a rozar los 40 grados. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ya ha establecido el aviso amarillo para estos días, que afecta al centro de la provincia, es decir, a la campiña cordobesa.

Durante este viernes, la Aemet espera temperaturas que oscilen entre los 19 y los 37 grados. De esta forma, durante buena parte de la semana, una tregua del calor ha permitido dejar atrás el mayor episodio de altas temperaturas de ese año y de cualquier mes de agosto desde que hay registros. Sin embargo, el sábado y el domingo las previsiones apuntan a un incremento del mercurio, que podría alcanzar los 39 grados. Esta subida irá acompañada de cielos parcialmente nublados durante el domingo.

Según la agencia de meteorología, estos intervalos podrían aumentar el lunes y dejar 40 de máxima. Los días posteriores, la provincia experimentará una nueva bajada. El martes 24 de agosto, los termómetros marcarán temperaturas entre los 22 grados, como mínima, y los 38, como máxima. El miércoles, el descenso será más perceptible, ya que no se esperan más de 35 grados. Las mínimas se mantendrán hasta el jueves, cuando podrían bajar a 18. Ese día, las máximas apenas podrían incrementarse un grado, hasta los 36.

A pesar de este nuevo aumento previsto, las temperaturas se quedarán lejos de los 47 grados rozados en la capital (46,9) y superados en Montoro, que volvió a marcar un récord histórico para España con 47,4 grados. Cabe recordar que, durante el pasado sábado, todas las estaciones de meteorología en la provincia sobrepasaron la barrera de los 43 grados, en la que supuso la segunda de tres jornadas en aviso rojo por riesgo extremo.