En lo que va de 2021, el Servicio de Control de Plagas de Sadeco, dependiente del Departamento de Sanidad y Bienestar Animal (SBA) e Higiene Ambiental, ha realizado un total de 21.345 revisiones de puntos de alcantarillado con el fin de localizar y tratar focos de rata común, lo que supone un incremento del 10,25% con respecto al mismo periodo del año anterior. En cuanto al control de la cucaracha periplaneta americana, se han tratado todas las alcantarillas accesibles de Córdoba y de las barriadas periféricas mediante la aplicación de pintura insecticida, alcanzando un total de 36.354 intervenciones hasta finales de julio, lo que supone también un incremento del 7,84 % con respecto a 2020. Los avisos recibidos por el servicio de control de plagas han sido 1.239, en línea con los registrados en 2020, si bien los referidos a presencia de plagas en la vía pública han disminuido un 10%. Las plagas objeto de estos avisos han sido fundamentalmente los roedores (50,84%), las cucarachas (24,46%) y los insectos voladores que pican -mosca negra, mosquito común y mosquito tigre (9,28%). El resto han sido por otras especies. El 89% de los avisos recibidos se atienden en las primeras 24 horas al objeto de controlar posibles focos de plagas y mitigar la alarma social que generan. 

Dos operarios haciendo trabajos de control de plagas en alcantarillados CÓRDOBA

Mosquito tigre

Esta especie invasora sigue extendiéndose por la parte norte de la ciudad por lo que el Servicio de Control de Plagas junto con la Universidad de Córdoba siguen atendiendo las llamadas de los ciudadanos con objeto de localizar posibles focos e informar de cómo contenerlos. Asimismo, y como en años anteriores, el Servicio de Comunicación de Sadeco está haciendo campañas informativas por las zonas recientemente afectadas. Como ya informó este periódico, Paraíso Arenal es la nueva zona en la que se ha establecido este díptero que se detectó por primera vez en nuestra capital en 2017. Desde entonces se le hace seguimiento y en estos años la incidencia de avisos ha ido descendiendo. En 2019 se comunicaron 245 posibles casos de los que el 34,3 % resultaron negativos y en 2020 fueron 185 avisos con un 38% falsas alarmas. Este díptero se caracteriza por presentar una coloración negra de fondo con finas líneas blancas en la cabeza, cuerpo y patas. Como sucede con los mosquitos autóctonos de nuestra ciudad, es hematófago, es decir, sus hembras necesitan alimentarse de sangre de mamíferos para poder realizar la puesta de los huevos. La picadura suele ser similar a la de otros insectos de su tipo. Las zonas más afectadas suelen ser las piernas, por la tendencia de este mosquito a volar a ras del suelo y suele actuar sobre todo por la mañana y a última hora de la tarde. Cuando se detecta un adulto de este mosquito, hay que suponer que el foco de cría se encuentra muy cerca del domicilio, frecuentemente en el patio o jardín ya que no suelen desplazarse en largas distancias. Ante todo, hay que evitar los pequeños acúmulos de agua ya que es ahí donde mejor proliferan.