Si la ingesta de fruta es siempre recomendable en verano adquiere una mayor relevancia tanto por sus propiedades nutritivas como por su alta capacidad de hidratación. En la cadena de fruterías Frutas Valverde los reyes del verano son la sandía y el melón. Así lo indica su responsable, José Butelo, quien señala que a éstos se suma el melocotón, la nectarina y el paraguayo. “Hasta hace poco se han estado vendiendo también cerezas y albarillos pero la época de estos ya ha pasado” asegura.

En Frutas López, en pleno centro de la capital, su propietario, Antonio López, explica que a los clásicos del verano, como él llama a la sandía y melón, se suma la fruta de hueso, entre la que destaca el paraguayo. “Toda la fruta de verano, en general es muy demandada, porque depende del gusto particular de cada cliente pero es verdad que los que vienen aquí se llevan más las piezas pequeñas como ciruelas amarillas y negras, nectarinas o melocotones”. También indica este frutero que cada vez más es tendencia vender la sandía “en cuartos” porque “yo las traigo muy grandes, y aquí tengo bastante clientela que viven con su pareja y prefieren llevarse menos cantidad porque cuando la sandía pasa de dos días empieza a cambiar el sabor y la textura”.  A la semana, en esta tienda, López calcula que se venden unos doscientos kilos de sandía y otros tantos de melones.

La fruta de temporada, aliada para la hidratación en verano. CHENCHO MARTÍNEZ

Vicente Jurado, de Frutas Jurado, se dedica a la distribución de fruta pero también tiene un puesto en la localidad de Villaharta. A la lista de frutas estivales más demandadas añade la platerina, un injerto de paraguayo y nectarina “sin pelo” con un sabor “diferente” muy demandado por sus clientes. En todos los casos, los precios se mantienen estables respecto al año anterior si bien, “varía según la fruta”. Este año, apunta este frutero, hay menos producción de nectarina lo que ha hecho que su precio sea algo más caro. Como destacaba José Butelo, de Frutas Valverde, “en un mundo donde manda la oferta y la demanda los precios pueden cambiar de un día para otro”.

Beneficios nutricionales

Según el Colegio Profesional de Nutricionistas y Dietistas de Andalucía (Codinan) en verano es imprescindible mantener la hidratación corporal y la fruta de temporada ayuda en esta labor de recuperación por lo que es conveniente “priorizar al menos la ingesta de cinco piezas al día”.  El calor y la exposición al sol son las principales características de esta época que, mal llevadas, pueden suponer un riesgo para la salud. Ante las altas temperaturas el organismo reacciona produciendo sudor, lo que implica una pérdida de agua, vitaminas y minerales, que es necesario reponer para evitar la deshidratación. También el sol activa la producción de radicales libres induciendo la sequedad y consecuente envejecimiento de la piel. Para ello, las frutas de verano, además de ser refrescantes, proporcionan el agua, las vitaminas y los minerales que el organismo necesita, además de fibra, fundamental para la regulación intestinal. De ahí que las frutas deban ser tenidas como uno de los principales componentes de la dieta veraniega, especialmente entre comidas, pues, si se toman frescas, ayudarán a saciar la sed, a reducir la sensación de calor y a saciar el apetito. Se aprovechan, en definitiva, todas sus cualidades nutritivas.

La fruta ayuda frente a la pérdida de agua, vitaminas y minerales ante el calor. CHENCHO MARTÍNEZ

En general tienen poco valor energético, pues las calorías proceden de los azúcares que contienen en forma de fructosa, sacarosa y glucosa, todos ellos de fácil digestión. Estos aportan hidratos de carbono simples, oscilando su contenido entre el 5 y el 18% del peso de cada pieza. Además casi no contienen grasa y apenas aportan proteínas que, en algunos casos, contienen aminoácidos esenciales que el organismo humano no es capaz de producir por sí mismo y que, sin embargo, necesita para su buen funcionamiento.