El alcalde de Córdoba, José María Bellido, considera que el hecho de que Córdoba haya entrado de nuevo en el nivel 3 de alerta por el coronavirus debe servir para que los cordobeses “tomen conciencia” del peligro que supone esta enfermedad, aunque entiende que las restricciones no afectarán demasiado a nuestra vida diaria. El regidor ha recordado que no debemos olvidar lo que ha significado el covid-19 en nuestras vidas y ha pedido no frivolizar las estadísticas de hospitalizados porque detrás de los números hay personas que en esto momentos tienen en riesgo sus vidas.

En todo caso, el alcalde también ha querido aportar una visión alentadora al entender, como apuntan ya algunos expertos, que podríamos estar llegando ya al pico de la quinta ola. “Al margen de si estamos o no en el pico debemos seguir cuidándonos; llevo diciendo esto desde el final del estado de alarma del pasado 9 de mayo”, ha recordado.

Vacunas y pasaporte covid

José María Bellido también se ha mostrado optimista respecto a la campaña de vacunación y ante el hecho de que Córdoba sea la provincia que encabeza el número de personas inmunizadas. En esta línea, ha animado a los más jóvenes a pedir cita para ser vacunados, aunque las fechas sean malas por las vacaciones, y a alcanzar pronto el 80% de vacunados, ya que a partir de ahí debe producirse una importante reducción de los contagios. Asimismo se ha pronunciado sobre el hecho de que el 80% de los pacientes ingresados en UCI no tengan vacunas, para decir que el fenómeno tiene dos caras: por un lado, dice el alcalde, el porcentaje demuestra que las vacunas funcionan; y por otro lado, demuestra que es necesario seguir animando a la población a vacunarse. Así, aunque ha reconocido que el miedo es libre, ha insistido en que son mayores los riesgos de no vacunarse que las reacciones provocadas por las vacunas.

Por último, el regidor cordobés se ha mostrado a favor de la implantación de un pasaporte covid para entrar por ejemplo en establecimientos hosteleros, pero siempre y cuando el porcentaje de vacunados sea muy elevado y todas las personas en edad de vacunarse hayan tenido la oportunidad de hacerlo. Lo contrario, considera, podría ser “casi discriminatorio”.