Los vecinos del Santuario y de San José Obrero han acogido con alegría la esperada noticia de la declaración del Área de Regeneración y Renovación Urbana (ARRU), que incluirá ayudas a la rehabilitación de 1.016 edificios y a la instalación de ascensores, entre otras medidas. Se trata de un programa impulsado por la Consejería de Fomento de la Junta de Andalucía (su titular, Marifrán Carazo, fue la encargada de anunciar la noticia) que supondrá una inversión global de 3,98 millones en Córdoba por parte de la administración autonómica. A esa cantidad se añadirá un millón más por parte de la empresa municipal de vivienda, Vimcorsa, que ha sido la demandante del programa, y otra pequeña parte la pondrán las comunidades de vecinos. Se espera que las obras puedan dar comienzo a mediados del 2022.
El presidente de Vimcorsa, Salvador Fuentes, ha mostrado su satisfacción y afirmado que es "muy buena noticia para la ciudad que dice mucho del trabajo de la empresa municipal de vivienda y que viene a solucionar un problema que afecta a cientos de familias". Para el también presidente de la Gerencia Municipal de Urbanismo la declaración servirá para "darles un soplo de esperanza después de muchos años para que puedan seguir viviendo dignamente en su barrio de toda la vida". Asimismo ha recordado que esta actuación es un compromiso del presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, del alcalde, José María Bellido, y suyo propio y ha garantizado que seguirán desarrollando durante lo que queda de mandato y en otros barrios necesitados este tipo de actuaciones.
El presidente de la asociación de vecinos del Santuario, Rafael Carmona, espera que en unos días Fuentes los convoque para darles la información oficialmente. «Para nosotros lo más importante es terminar con la instalación de ascensores y queremos meter la sustitución de cubiertas, que son cancerígenas, y si es posible poner placas solares», comenta. En todo caso, reclaman esa información de primera mano porque después de tanto años de espera (casi una década desde que la misma administración que anuncia hoy las ayudas, la Junta de Andalucía, frenara en seco la instalación de ascensores) necesitan saber «cuánto, cómo y en qué momento va a salir las ayudas».
El presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano, Juan Andrés de Gracia, reivindica precisamente esos diez años de lucha protagonizados por el movimiento vecinal y ciudadano «que ha tirado del carro y ha ejercido una presión social» para que la administración no se olvidara de ellos. «Es una gran noticia», afirma De Gracia que incide en el sufrimiento que supuso para miles de personas que se paralizasen las inversiones para la colocación de ascensores, sin los cuales muchas viviendas son auténticas cárceles para quienes viven en ellas (como el caso del vecino de la Fuensanta, Pepe Báez que ha relatado a este periódico). Desde el Consejo del Movimiento Ciudadano consideran, además, que este proyecto podría aplicarse a otras zonas de la ciudad, como Ciudad Jardín, necesitadas también de una rehabilitación ambiciosa.
Las viviendas beneficiadas por las ayudas se distribuyen, por un lado, en el barrio del Santuario (todo lo que está entre la avenida de Nuestra Señora de la Fuensanta, Calderón de la Barca, Virgen del Mar y San Martín de Porres), que cuenta con 56 bloques con 863 viviendas; y por otro, en San José Obrero (todo lo que se encuentra entre la avenida del Ministerio de la Vivienda, Acera Alonso Gómez de Figueroa, Virgen del Mar y San Martín de Porres), que dispone de 69 bloques con 1.104 pisos. Según el estudio de Vimcorsa, la empresa municipal que ha solicitado el proyecto, en ese ámbito hay 125 bloques, de los que el 34% (42) no reúnen condiciones de accesibilidad y más del 50% necesitan obras de conservación. Un 22% de las viviendas se encuentran en estado ruinoso, malo o deficiente, según el informe, que alude a que los problemas de conservación que presentan los edificios se refieren a las instalaciones de saneamiento, agua y electricidad y a filtraciones.
