Los comercios del barrio de la Judería siguen sin remontar su economía por culpa de la pandemia provocada por el coronavirus y viven una situación "complicada" debido a la escasez de turistas, según ellos mismos relatan. Con el verano de por medio, que es temporada baja en Córdoba, los problemas aumentan como consecuencia del calor, difícil de aguantar, lo que provoca que las visitas caigan durante estos meses.

Mientras duraron las restricciones de movilidad, la gran mayoría de negocios no se animaban a abrir. El cierre de la Mezquita-Catedral supuso un varapalo para ellos pero, según explican algunos de los consultados por este periódico, "tirando de ahorros", "trabajando mucho más que antes" y "con algo de esperanza", todas las tiendas decidieron volver a la carga siendo conscientes de que la pandemia no ha acabado. La reapertura de la Mezquita-Catedral fue recibida con alivio entre el sector y, ahora, el hecho de permanecer abierta todos los días, poco a poco, los establecimientos lo van notando.

Aunque estemos dentro de una nueva normalidad, las restricciones siguen presentes. Los turistas que más se animan a visitar la ciudad son, sobre todo, de ámbito nacional. Con lo que respecta a los turistas extranjeros, aún son muy pocos los que eligen Córdoba como destino. "Hay algo de turismo internacional, como franceses y algunos ingleses, pero poquitos", afirma una de las empleadas de la tienda de souvenirs Artesanía la Torre.

Clientes en Artesanía Los Patios. CHENCHO MARTÍNEZ

Cuando las tiendas cerraron, mucha de la mercancía que había en las mismas quedó guardada y ahora necesitan sacar todo para que no quede nada en el almacén. Para ello, intentan cambiar mucho el lugar que ocupa cada artículo o intercambiarlo por otros para que todo pueda ver la luz. Además, tratan de ofrecer muchos descuentos y ofertas para así poder llamar la atención del cliente. Sin embargo, otras tiendas, como Stamp Timbre Sello intentan seguir su misma línea de siempre y apuestan por la "exclusividad". "Tema de descuentos no, simplemente ser constantes y tener productos exclusivos", afirma uno de sus empleados, "No estamos haciendo nada diferente a lo que siempre hemos hecho, a nuestra política de siempre", concluye.

Los negocios siguen luchando por salir adelante y recuperar todo lo que han perdido. A pesar de que son conscientes de que es un proceso largo y de estar a la espera de que la situación mejore, los comerciantes ponen sus expectativas en las ayudas y, sobre todo, en la vacunación.