Más de 30.000 parejas han tramitado su divorcio en Córdoba desde que se aprobó la Ley del Divorcio española el 22 de junio de 1981, hace 40 años. Llegaba nada menos que 49 años después de la aprobación de la primera regulación del divorcio, aprobada durante la República (1932) que ponía a los dos cónyuges en igualdad de condiciones ante la ley, algo revolucionario para la época ya que, según explica la abogada de familia María Dolores Azaústre, hasta entonces las uniones «se regían por el Código Civil que solo contemplaba la muerte de uno para su disolución». En 1939, aquella ley quedó derogada y todas las sentencias de divorcio anuladas. La ley de 1981, que vio la luz en plena Transición, permitía el divorcio con condiciones, siempre que existiera una causa justificada y tras un periodo de separación que debía servir como opción para la reconciliación. «Pasado ese tiempo, se exigía la demostración del cese de la convivencia o la violación grave o reiterada de los deberes conyugales, asentando el divorcio en la culpa y la penalización del cónyuge culpable», señala la letrada.

El Instituto Nacional de Estadística recoge la evolución a través de los años del número de divorcios, que empezó siendo algo residual para ir ganando fuerza con los años y, sobre todo, desde el año 2005, cuando desapareció esa necesidad legal tan perentoria de demostrar ante un juez las causas de separación y divorcio y se estableció que bastaba la voluntad de uno de los cónyuges para solicitarlo. La agilización de los trámites y la reducción del plazo mínimo para pedirlo tras celebrar el matrimonio a tres meses (salvo causa mayor en que se suprime) granjeó a esta nueva etapa la del divorcio express. Azaústre, que empezó a ejercer en 1997, especializándose poco a poco en el Derecho de Familia, señala que aún hubo otra reforma importante en el 2015, la de la Jurisdicción Voluntaria, que «afectaba al ámbito procesal con la idea de desjudicializar los divorcios en los que no hay hijos o estos ya son mayores».

Los datos ofrecen la radiografía de lo que ha ocurrido en estos años. Desde que se aprobó la ley hasta el año 2004, Córdoba registró una media de 400 divorcios anuales, una cifra que alcanzó su récord en 2005 y 2006 (1.835 y 1.854) para mantenerse en torno a 1.500 al año. La crisis del 2008 hizo que repuntaran un poco y en los últimos seis años, coincidiendo con la bajada de matrimonios, han descendido un 22,7%, de 1.712 en 2014 a 1.323 en 2020. Afortunadamente, la gran mayoría (dos tercios) son de mutuo acuerdo.