Kutxabank Gestión, a la que pertenece Cajasur, ha adquirido el "compromiso de impulsar criterios sostenibles" a través de toda su inversión, con una "visión realista y realizable", pues es la primera y única gestora del mercado que logra encuadrar el 100 por 100 de los fondos de inversión en distribución dentro del artículo 8 de la nueva normativa sobre divulgación relativa a la sostenibilidad, conocida como SFDR por sus siglas en inglés.

Según ha informado Cajasur, en la práctica dicha clasificación significa que la gestora reafirma el compromiso de promover características sostenibles a través de la totalidad de su cartera de inversiones, con un "enfoque realista y realizable", según ha indicado Joseba Orueta, consejero delegado de Kutxabank Gestión.

Será a partir de 2022 cuando la modificación prevista en la normativa MiFID I apremie a los gestores comerciales a preguntar a sus clientes acerca de sus preferencias de sostenibilidad a la hora de contratar este tipo de productos de inversión.

Meses antes de la entrada en vigor de la regulación, Kutxabank Gestión ya ha situado todos sus activos bajo gestión en los citados parámetros de sostenibilidad, al cumplir íntegramente con el artículo 8 del nuevo texto legal, que clasifica aquellos fondos que promueven características ambientales, sociales y de buen gobierno (ASG) en sus procesos de inversión.

Para ello, Kutxabank Gestión ha definido durante los últimos años una estrategia de inversión que permite garantizar su "compromiso global con la sostenibilidad de sus inversiones", ha destacado el banco.

Diseñó, en un inicio, una lista de exclusión que deja fuera todos los activos relacionados con la producción de armas controvertidas, el daño medioambiental extremo, las prácticas de corrupción severa, la explotación de menores, o la violación de derechos individuales por guerra o conflicto, así como aquéllos que estén ubicados en paraísos fiscales.

En la actualidad, su estrategia de inversión aplica un enfoque best in class, que consiste en premiar, en cada uno de los sectores a aquellas compañías con mejor comportamiento en materia ASG.

Para ello, la Gestora ha configurado un sistema de rating ASG interno, que permite calificar el estado actual de las empresas en términos de sostenibilidad y analizar su evolución en el contexto de su sector y área geográfica.