Dentro de poco la ciudad contará con una carretera más, el tramo de ronda Norte que ejecuta Urbanismo entre Fuente de la Salud y la Nacional-432, que está prácticamente acabado. De cara a su apertura al tráfico, para la que no hay fecha concreta aunque Urbanismo espera que se produzca este mismo mes, los vecinos han planteado sus demandas, entre las que se encuentra que se limite al máximo el tránsito de vehículos pesados por la misma para no saturarla. Además, quieren que no se inaugure hasta que no esté totalmente acabada con todos los elementos que la conviertan en una vía urbana, es decir, semáforos y pasos de peatones que le den ese carácter de avenida y no de carretera que desean. Esas peticiones fueron dirigidas ayer por el presidente del Consejo del Movimiento Ciudadano, Juan Andrés de Gracia, al alcalde, José María Bellido; al delegado de Movilidad, Miguel Ángel Torrico; y al ingeniero del Servicio de Proyectos de Urbanismo Rafael Ruiz en la reunión que mantuvieron para abordar el proyecto de ronda Norte que ejecutará la Junta, el que irá desde Fuente de la Salud hasta la ronda de Poniente y que dará continuidad a la que está en obras.

La parte de ronda municipal, en la que ya se ha empezado a colocar la señalización horizontal y vertical, «debe tener la función de desahogar el tráfico más que la de incorporarlo y por eso ha de tener limitación y se debe ser exigente con el tráfico pesado», señala De Gracia, que considera que el área de Movilidad debe llevar a cabo una ordenación del tráfico que no sature su entrada desde la zona en la que están las cocheras de Aucorsa. «No se puede abrir», insiste, «sin que esté la semaforización pactada y sin que la ordenación de la circulación sea la de una avenida y no la de una ronda». El Ayuntamiento, por su parte, ya tiene el contrato para los semáforos, que son la razón de que la apertura de la ronda se produzca algo después de lo inicialmente previsto. Los semáforos que regulan la parte de la Asomadilla necesitan un contrato aparte.

Durante esta semana se está colocando la señalización vertical y horizontal. FRANCISCO GONZÁLEZ

La reunión no estaba convocada para hablar del tramo municipal, sino del que corresponde a la Junta. En la misma estuvieron presentes también los presidentes de los consejos de distrito Norte, Juan Gregorio, y Noroeste, Teresa Caballero, pero no hubo ningún representante de la Junta, aunque sí compromiso de mantener otro encuentro más adelante. Los vecinos llevaban tiempo esperando esta reunión para recibir una respuesta sobre las propuestas que habían realizado a la Junta sobre el trazado, respecto al que pedían un mayor soterramiento y más mejoras. Los representantes vecinales quieren que las dos fases previstas (la que va de la glorieta de María de Maeztu hasta la de Santa Beatriz y la que está entre esta y la Asomadilla) se plasmen en un solo proyecto.

De Gracia recuerda que en la parte que afecta al consejo de distrito Norte hay un mayor consenso pero quedan cuestiones por resolver en la que transita por el Noroeste. El distrito Noroeste pide un mayor soterramiento «y lo que nos ofrecen es todo tipo de medidas complementarias y la posibilidad de seguir trabajando mientras se redacta el proyecto en buscar soluciones, sobre todo, en la zona que hay entre la glorieta María de Maeztu y Académica García Moreno», cuestión que, según De Gracia, debe resolverse en una próxima reunión.