El ecónomo diocesano José Luis Vidal Soler ha presentado hoy los datos económicos de la Diócesis de Córdoba correspondientes al año 2020, así como los datos de las últimas campañas tributarias (campaña Por Tantos de la Renta), que en los últimos tres años ha experimentado un crecimiento de personas que se deciden por esta opción. En concreto, en 2020 marcaron con la x la casilla de la Iglesia en Córdoba 154.989 contribuyentes, 3.694 más que en 2019, lo que supuso ingresos por valor de 3,8 millones. La media de contribuyentes cordobeses que dedican parte de sus tributos a la Iglesia Católica es del 44%, muy por encima del 34% de la media española.

Respecto a las cuentas de la Diócesis de Córdoba decir que cerró el año 2020 con unos ingresos de 22,1 millones, un millón menos que el anterior año, de los que el 35,2% provienen de las aportaciones de los fieles (7,8 milllones) y el 20,9% de la asignación tributaria de la renta y de determinados proyectos financiados por otros fines de interés social (4,6 millones). El año se cierra con un resultado consolidado positivo de 567.957 euros, frente a los 243.600 euros negativos con los que se se cerró 2019. Ese saldo positivo de un año que se esperaba malo y que “no lo ha sido tanto” por la contención del gasto y las aportaciones de los fieles, ha explicado el ecónomo, permitirá financiar parte del déficit en el que se espera incurrir en el año 2021. 

Descienden los ingresos por bodas, bautizos y comuniones

Los ingresos también se nutren por la celebraciones sacramentales (2,8 millones), que han disminuido a cuenta de la crisis y el confinamiento en 1,4 millones de euros respecto al 2009. La Diócesis también percibió ingresos por la venta de bienes inmuebles y  herencias por valor de 1,3 millones de euros, lo que supuso el 6,20% del total. Además, recibió 116.000 euros en subvenciones publicas para acomter obras en sus templos. 

Las acciones pastorales aglutinan el 35% de los gastos (7,6 millones), seguidas del 15% de las retribuciones del clero (3,2 millones) y el personal seglar (2,5 millones). A suministros y al mantenimiento de edificios se dedicaron el 24,23% de los gastos, la cuarta parte del global  (5,2 millones) más los gastos extraordinarios, un 13%, que se destinaron a la rehabilitación de templos y del propio Obispado (2,8 millones). 

También ha desglosado los datos correspondientes a las 232 parroquias que hay en Córdoba, que frente a la situacion de pandemia han vivido “con una austeridad absoluta”, gastando 1,6 millones de euros menos que el año anterior, lo que ha ayudado a sufragar el déficit de 400.000 que se produjo en las parroquias en 2019. El 75% de los ingresos de parroquias provienen de los fieles (4,9 millones) y de los ingresos sacramentales (1 millón), ambas cosas registraron una bajada de 300.000 euros con motivo de la crisis y la suspensión de eventos. 

En resumen comparando los años 2019 y 2020, la Diócesis de Córdoba observa un descenso de las colectas de un 39%, pero un aumento de las aportaciones de los fieles a las caritas parroquiales, que han subido un 47%. Han bajado los ingresos por sacramentos un 30,79% y los ingresos por herencias (bajan un 75%) y se han incrementado las aportaciones del Obispado para atender las parroquias 58% . Los gastos pastorales han bajado un 42%, pero los gastos asistenciales subieron un 25,2%, y se rebajan todos los demás gastos, que en total se han reducido un 20,7%.

La verdadera crisis, en 2021

El resultado positivo con el que el Obispado cierra el 2020 “permitirá afrontar las verdadera crisis que vendrá en 2021”, según ha indicado el ecónomo, que también ha explicado que el presupuesto aprobado para este años prevé unos ingresos de 7,4 millones, lo que supondrá una bajada de casi el 25%. No obstante los gastos solo bajarán un 12,73% “porque seguiremos incrementando las acciones pastorales, un 13% más (1,8 millones)”.  Además se hará una bajada de las retribuciones del clero (2,5 millones), un 17% los gastos de funcionamiento y un 28%,  el programa de rehabilitación de templos y parroquias. Con esos mimbres prevén cerrar 2021 con un déficit de más de 741.000 euros. 

11 millones menos por la falta de turistas en la Mezquita

Aunque lo que hoy se presentaban eran las cuentas de la Diócesis, se han dado algunas pinceladas de las del Cabildo, que ha sufrido un desplome de ingresos por el cierre de la Mezquita-Catedral y la ausencia de turistas. En 2020, los ingresos fueron de 4 millones y los gastos de 13 millones, lo que supone un déficit de más de 9 millones de euros. En 2019 los ingresos fueron de 15 millones de euros, por lo que se ha producido una disminución de más de 11 millones como efecto del covid en las cuentas del Cabildo.