Tres nuevos autobuses recorrieron ayer los polígonos de Las Quemadas, Chinales y Torrecilla-Amargacena para cubrir una necesidad histórica. «Nos ha costado, pero se ha conseguido», expresaba Antonio Navarro, el presidente de los empresarios ubicados en Chinales. «De no tener nada en 20 años a tener esto», el representante solo puede sentir satisfacción. «Estamos muy contentos», reconoce. Y es que por fin los polígonos cuentan con una conexión de transporte público que los una a la ciudad, tras la inauguración por parte de Aucorsa de tres nuevas líneas.
En el caso de Chinales, nunca antes un autobús había accedido al entorno del polígono. Ahora lo hará el CH en horarios de 9.00, 13.45 y 17.00 para los procedentes de Colón Norte. Para volver, las horas establecidas son las 9.30, las 14.15 y las 17.30. Un servicio que Antonio Navarro considera suficiente, por el momento, y positivo «no solo para los clientes, sino también para los propios empleados». Eso sí, como señala la gerente de Aucorsa, Ana Tamayo, habrá que esperar para conocer los resultados de la puesta en funcionamiento. Este puede ser un proceso -señala- de meses incluso, porque ahora es el momento de fomentar su uso y pulir el servicio. Según el representante de los empresarios en Chinales, ya están repartiendo notas informativas facilitadas por el Consistorio a los clientes de las empresas. Paciente, Navarro también espera a que el engranaje de las nuevas conexiones tenga más rodaje para saber la eficacia de un plan que, como Tamayo recuerda, está «vivo» y es «flexible».
Por lo tanto, las nuevas líneas a los polígonos podrían experimentar modificaciones, como podría ser la adaptación de horarios. De momento, desde Chinales muestran su agradecimiento. «Todo lo que se hable que se haga», pide Navarro. «Ya se ha hecho». Y ahora espera que las otras necesidades del polígono, como «unos badenes para que no se corra» o la «sincronización de los semáforos» para que no se produzcan atascos, lleguen de la mano. Él, sin duda, cree que «se van a hacer enseguida».
La misma satisfacción compartía ayer José Antonio Piedra, presidente de la Asociación de Empresarios de Las Quemadas (Quemasem), que recordaba los 25 años transcurridos desde la petición de un servicio de transporte público que cubriese las necesidades de las empresas del polígono. Actualmente suman 217 y su representante considera que este proyecto favorecerá al «desarrollo» de la zona y de las entidades situadas allí. «Hay empresas que exigían transporte para ubicarse aquí y otras que se han marchado por eso», explicaba ayer. Por lo tanto, será «bueno para el polígono y bueno para la ciudad».
En Las Quemadas, un servicio lanzadera rodea la zona desde ayer para conectar a los usuarios del servicio con otros autobuses o con el metrotrén y, de ese modo, llegar al núcleo urbano. «Nos parece estupendo», señalaba Piedra. Por eso, agradeció el esfuerzo al Consistorio y a Aucorsa. Además, aseguró que van a involucrarse al 100% con el proyecto, «comunicándolo bien a todas las empresas. Así, el representante de las entidades espera al desarrollo de otros dos ejes imprescindibles para el polígono, como resultan una «conexión con la autovía» y «la transformación de la N4, desde la universidad, en avenida».
Junto al autobús que recorrió por primera vez ayer el polígono de Torrecilla--Amargacena (TR), las nuevas líneas de Aucorsa protagonizaron un recorrido histórico para la que era una necesidad, como los propios empresarios expresaron, de hacía varias décadas. De esta forma, todos los espacios de Córdoba permanecen cubiertos por un servicio de transporte público. Los resultados hablarán de la eficacia de un proyecto que ya ha comenzado a rodar.
