La Plataforma Aire Limpio ha difundido un comunicado en el que acusa a la empresa cementera Cosmos en Córdoba de "intentar eludir las medidas que la Junta de Andalucía pretende imponer para controlar emisiones contaminantes y el elevado ruido que produce su actividad".

Según Aire Limpio, "la cementera ha mostrado su disconformidad con la iniciativa de la Junta de Andalucía de obligar a la fábrica a instalar una estación de medición de emisiones y a elaborar un estudio del ruido producido por ésta, aplicando en su caso las medidas correctoras necesarias para evitar molestias a las barriadas circundantes".

La plataforma señala que se trata de un expediente que "la Consejería de Agricultura y Desarrollo Sostenible ha puesto en marcha de nuevo, y con dos años de retraso". Aire Limpio denuncia que, "como es habitual desde que la fábrica entró en funcionamiento a finales de los años 30 del siglo pasado -señala el comunicado-, la cementera elude su responsabilidad y pone por delante de la salud del vecindario los intereses puramente crematísticos de sus accionistas, con una absoluta falta de empatía hacia los ciudadanos de esta ciudad que estoicamente vienen padeciendo sus molestias e incomodidades y denunciándolas desde hace muchas décadas a unas administraciones excesivamente complacientes hacia las multinacionales propietarias de la cementera".

La contaminación y el ruido "no es un debate social"

La plataforma entiende que "no es de recibo que la cementera afirme públicamente que el debate social no es un argumento válido para la adopción de medidas, cuando la contaminación ambiental y acústica provocada por la fábrica no es un debate social, es un auténtico clamor que se viene repitiendo históricamente y que no por casualidad se ha incrementado". En ese sentido Aire Limpio recuerda que ese incremento se demuestra "en la cantidad de denuncias recibidas por la plataforma por el depósito de polvo en las viviendas y vehículos del entorno y por el incremento del ruido provocado, sobre todo, por el funcionamiento nocturno de estas instalaciones". La plataforma afirma que "es grave contaminación física, química y acústica lo que los vecinos vienen padeciendo".

"Para eludir su responsabilidad -añade el comunicado de Aire Limpio-, la cementera incluso ha hecho públicas declaraciones en las que imputa un sesgo ideológico a las denuncias presentadas por las molestias ocasionadas por su actividad". En ese sentido, Córdoba Aire Limpio reconoce que "efectivamente hay un sesgo ideológico, pues poner en el primer plano de todas las políticas públicas y de las reivindicaciones ciudadanas la salud de las personas, subordinando a éstas los intereses puramente mercantiles, es ideología: se llama sentido común y se llama defensa de la vida y del interés colectivo".

La plataforma informa además en su comunicado que va a solicitar al Consejería de Agricultura y Desarrollo Sostenible que una empresa independiente homologada por la propia Junta elabore un estudio del estado de los filtros de la fábrica, "pues la cantidad de denuncias recogidas en el entorno de la fábrica sobre el depósito de polvo en viviendas y vehículos solo puede ser ocasionado por el mal funcionamiento de estos elementos".