- Hace un año se declaró el estado de alarma. ¿Qué cree que se ha hecho bien y qué se debería haber evitado?

- La respuesta de los ciudadanos ha sido ejemplar y conviene destacar el trabajo de los servicios sanitarios que han dado lo mejor de sí mismos para atender a quienes han sufrido el azote de este virus. Comenzaron trabajando en condiciones precarias y un salario que no recompensaba ni de lejos su ingente esfuerzo. Por lo que a mí personalmente me atañe, destacar la respuesta del sector agroalimentario, capaz de hacer llegar a los lineales los productos de primera necesidad. Se ha trabajado en el campo sin descanso y no ha existido carencia de ningún producto que necesitase el consumidor. Posiblemente en el lado negativo de la balanza pese la triste situación que vivieron las residencias de mayores, la descoordinación inicial en facilitar protección a los sanitarios, o el desabastecimiento de mascarillas y elementos de protección.

- ¿Qué considera prioritario en esta nueva etapa en la que nos encontramos?

- Es necesaria una mejor coordinación entre los países de la UE para dar la solución a una rápida vacunación; de lo contrario, sin vacunación o terapias que vengan a reducir el riesgo de colapso de los servicios sanitarios, estaremos abocados a una parálisis económica cuyas consecuencias probablemente aún no seamos capaces de ponderar. En lo económico, las primeras medidas han de ir orientadas a recuperar la confianza: de las instituciones europeas en España para que los fondos lleguen cuanto antes; de los países origen del turismo español; de los inversores y empresarios; y finalmente de los consumidores, para reactivar la demanda interna.

- ¿Se muestra optimista con una pronta recuperación de la economía de Córdoba/de su empresa y por qué?

- Córdoba cuenta con muchos activos, entre los que se encuentra el turismo, una agroindustria del máximo nivel cualitativo y una universidad reconocida que cuenta con interesantes grupos de investigación, y la enorme oportunidad que supone la próxima instalación de la Base Logística del Ejército de Tierra. Si los potenciamos saldremos pronto de la crisis.

- ¿Cuál ha sido para usted la mayor enseñanza de esta situación?

- Sin duda lo frágil que es nuestro sistema socio económico. Hemos comprobado de primera mano que la deslocalización de actividades productivas estratégicas para el bienestar (como medicamentos y material sanitario entre otros) es especialmente peligrosa, y nos pone en una situación de dependencia exterior nada aconsejable.