La futura base logística que el Ejército de Tierra implantará en Córdoba impulsará un puñado de actuaciones logísticas que están pendientes en la provincia desde hace años. Entre ellas, la Variante Oeste, el ramal ferroviario Algeciras-Boadilla o incluso el aeropuerto. El proyecto de Córdoba, que no ha hecho nada más que activarse con el anuncio el jueves del Ministerio de Defensa, deberá ahora formalizarse a través de un convenio entre el Ejército de Tierra y el Ayuntamiento de Córdoba, en el que se descienda al detalle sobre cómo será la ejecución del plan. Después de esa negociación se procederá a la materialización de la iniciativa , que no se espera que sea una realidad hasta dentro de tres años, según manifestó ayer el alcalde, José María Bellido, a CÓRDOBA.

En la negociación del convenio con Defensa acabarán detallándose cuestiones como la concreción de los terrenos que se destinarán a la base, el reparto de la carga que asumirán las administraciones implicadas, las vías de financiación se contemplan y los plazos para hacer efectivos dichos acuerdos.

Para José María Bellido es una certeza que la base logística actuará como palanca para otros proyectos de ciudad que llevaban tiempo paralizados. Entre ellos, la Variante Oeste, el ramal ferroviario (el eje Algeciras-Bobadilla) y habrá que ver en qué medida también el aeropuerto pasa a ser una instalación necesaria para las operaciones vinculadas a la base del Ejército. Cabe recordar que en el entorno de los terrenos que se presupone que se destinarán a este fin en El Higuerón se encuentran otras instalaciones vitales para Córdoba como el Centro de Transporte de Mercancías, el Parque Joyero y el Centro de Ferias y Exposiciones, aún en construcción. Para Bellido, la decisión de que Córdoba vaya a acoger la base logística ha de entenderse como la consecución de «un polo industrial» para la ciudad y la provincia. El alcalde destacó que la base «de Córdoba», sino del resto de España, por lo que «lo que se hará todo lo que sea necesario para que funcione», garantizó.

El Ministerio de Defensa, por su parte, destacó ayer que se trata de un proyecto de Estado, único y pionero en el mundo. Asimismo considera que la inversión necesaria para acometer este innovador proyecto se amortizará en un breve período de tiempo y que repercutirá positivamente en el erario público. En la nota informativa se recuerda que las capacidades estratégicas del Ejército de Tierra pueden ser aprovechadas por las Fuerzas Armadas en su conjunto, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como por otros sectores de la administración e incluso ejércitos aliados. Además, han sido incorporadas las lecciones aprendidas de la operación Balmis, para que el renovado potencial logístico que dicha base proporcionará al ET pueda ser puesto al servicio de la sociedad.

El principal reto es la sincronización, ya que se debe realizar la transición del actual modelo al nuevo sin pérdida del apoyo logístico. La necesidad de mantener la cadena logística operativa y los esfuerzos en atender de manera preferente las diversas circunstancias del personal militar y civil implicados condicionan la hoja de ruta para la transición.

Durante este tiempo, la actividad en los centros logísticos actuales se mantendrá hasta la completa puesta en marcha de la nueva Base, de forma que el apoyo logístico esté siempre garantizado. En ese sentido, se busca que el proyecto tenga el menor impacto posible en el personal civil y militar. No se tienen previstos traslados forzosos de personal civil.

Realidad virtual, 3D, inteligencia artificial y robótica

Realidad virtual, 3D, inteligencia artificial y robóticaEl Ejército de Tierra recordó ayer en un comunicado que viene trabajando en la racionalización de sus estructuras de apoyo logístico desde hace más de 10 años, con la idea de mejorar la eficacia y reducir costes en el mantenimiento de la infraestructura, dada la antigüedad de las instalaciones actualmente ocupadas por los 12 centros en servicio.

Desde que se iniciaron los trabajos para la transformación del Ejército hacia la futura Fuerza 2035, este proyecto ha cobrado una mayor trascendencia y está indisolublemente ligado a la necesidad de incorporar a todos los procesos del Ejército de Tierra el soporte tecnológico necesario. La nueva base, dice el comunicado, será un centro moderno que incorporará sistemas basados en la robótica, inteligencia artificial, impresión en 3D, realidad virtual y aumentada, para ello, contará con la colaboración de la Universidad de Córdoba. Esta alta tecnología va a permitir una optimización del personal militar, aumentando el disponible para la Fuerza.

Una vez que la nueva base se encuentre a pleno rendimiento en Córdoba, generará unos 1600 empleos todos altamente cualificados, con el consiguiente beneficio para la zona de implantación de la Base Logística.