Con la llegada de enero llega también uno de los dulces más esperados del año, el Roscón de Reyes. Su historia se remonta al siglo II a.C. cuando era tradición comer la torta a base de miel, con frutos secos y dátiles que hoy conocemos como roscón. Pero no es hasta el siglo XVIII, con el rey Luis XV, cuando encontramos el Roscón tal y como lo conocemos hoy día. Cuenta la historia que el cocinero del monarca elaboró el dulce e introdujo un medallón de diamantes para sorprenderlo. Al rey le gustó tanto la idea, que se encargó de promover el consumo del roscón entre la aristocracia francesa y europea introduciendo una moneda como sorpresa en su interior. La costumbre llegó a España y se convirtó en una de las tradiciones más arraigadas del día de Reyes.

Habitualmente, las sorpresas dentro del dulce comprenden el haba, diferentes figuritas e incluso monedas de chocolate. Pero este año, la Pastelería Confitería San Rafael ha retomado la costumbre del cocinero de la corte francesa y ha añadido 4 anillos de oro, uno con un rubí, otro con un zafiro, un tercero con un brillante y el último con una esmeralda, en los diferentes roscones que están elaborando. Los precios oscilan, según el tamaño del dulce, entre los 24, 28 y 35 euros.

A pesar de la pandemia y la actual crisis económica, la compra de roscones no se ha visto comprometida. En la Pastelería Confitería San Rafael se esperan unas ventas de más de 1.000 roscones según nos cuenta Esperanza Romero, dueña de la empresa. En otras pastelerías, como la Confitería Salazar de la empresa Hermanos Fernández, las compras del Roscón de Reyes tradicional también se están manteniendo y «se está portando bien la gente, con lo que tenemos ahora mismo montado, están respondiendo», asegura Ángela Torres, empleada del negocio. La tradicional Pastelería Savoy, ha reducido el tamaño de los roscones para adaptarse a las reuniones familiares permitidas, pero esperan las mismas ventas de roscones que el año pasado, entre 2.000 y 2.200. Los precios en ambas pastelerías van desde los 14 a los 25 euros.

El éxito del Roscón está asegurado, ya que la sencillez de sus ingredientes lo corona como uno de los dulces preferidos de todos los hogares. Ya sea de los roscones tradicionales o de los más especiales de este año que esconden un valioso premio, en cada casa se disfrutará y habrá un «tontolaba» que lo pagará.