La Gerencia de Urbanismo ha sacado a concurso las obras de puesta en valor, conservación y protección de 61,36 hectáreas de El Patriarca, intervención que forma parte del programa Edusi y que se financiará con fondos Feder y con presupuesto municipal (120.000 euros). Los trabajos para convertir en parque periurbano esa zona tendrán un presupuesto de 572.500 euros y un plazo de ejecución de medio año. Las empresas interesadas disponen hasta el día 11 de diciembre para presentar ofertas. La idea de Urbanismo es que las obras empiecen en el 2021.

El proyecto contempla la colocación de vallas que impidan el acceso de vehículos de motor a las zonas sensibles; la señalización de todo el espacio en general y de los senderos; la incorporación de especies como el quejigo, alcornoque, fresno, almez, álamos y taraje (en total se plantarán 400 árboles y 350 arbustos); trabajos de silvicultura; y tareas contra "la erosión por escorrentía y a favor de la infiltración hídrica en el terreno de aguas pluviales, recuperando aportes hídricos perdidos por el desarrollo de las urbanizaciones colindantes".

El objetivo es recuperar El Patriarca, que es una zona de bosque degradada; delimitarlo y establecer las zonas de acceso permitidas; señalizarlo y poner en valor su riqueza medioambiental, adaptando los recorridos para el disfrute de la ciudadanía y del turismo. El fin es que tras estas actuaciones se organicen actividades educativas y visitas guiadas.

El proyecto, redactado por el arquitecto Rafael García Castejón, con la colaboración del paisajista Nacho Montero, y de Manuel y Javier Ostos en temas de accesibilidad, indica que desde hace años El Patriarca soporta el impacto negativo del acceso incontrolado de personas con vehículos a motor para la realización de actividades de ocio "provocando la diseminación de las basuras, daños en la vegetación y molestias a la fauna". Además, añade el documento, esta zona "se ha venido utilizando de vertedero de escombros y enseres viejos". A esto se une que la mayoría del arbolado lo integran encinas, acebuches y algarrobos y es escasa la presencia de otras especies.

El proyecto indica que se dispondrán tres badenes para el drenaje transversal y un acceso peatonal por la calle Lentisco, así como tajeas para la evacuación del agua. Para el drenaje longitudinal, se llevarán a cabo cunetas. Para acceder al parque desde el este se habilitará el eje principal, que parte del acerado de la calle Lentisco. Al inicio del mismo habrá un aparcamiento adaptado para personas con discapacidad. Las obras consistirán en mejorar el camino "rellenando las heridas producidas por las escorrentías, tratando de canalizarlas en los bordes", y en la plantación de especies vegetales de hoja caducifolia que aporten sombra, según consta en el proyecto.

Los trabajos consistirán además en la instalación de hidrantes y bocas de riego y en la adecuación de caminos interiores. Para ello se desbrozará el terreno y se arrancarán tocones, tras lo que se acondicionará. Dentro de los caminos, habrá algunos accesibles en el recorrido en bucle que se va a habilitar que llevarán a un punto en el que habrá un espacio de estancia de 2.690 metros cuadrados, en el que se colocará mobiliario urbano (banco tipo pic-nic y papeleras rústicas). En esa zona es donde podrán realizarse peroles.

Imagen previa del camino principal.

Imagen virtual del camino principal con recreación de forestación propuesta.

Además del acondicionamiento del acceso noreste al parque, que es donde estará el aparcamiento, el proyecto contempla una entrada peatonal por el sur, por el plan parcial de la Arruzafa (O1), donde habrá plazas de aparcamiento para personas con movilidad reducida. Tanto en la zona sur como en la norte, se colocarán hitos de madera que impidan la entrada de vehículos.

El proyecto incluye tareas de limpieza, silvicultura y forestación, así como de consolidación de elementos existentes como las represas, el aprisco, la alberca, los restos que hay junto al mirador, los del muro de la zona noreste y la torre del transformador.

Montaje virtual de las actuaciones previstas en punto de reunión.

La zona representa una superficie aproximada de 2.690 m2.

Al margen de la riqueza medioambiental, El Patriarca cuenta con vestigios arqueológicos, como “afloramientos rocosos con huellas de frentes de cantera, restos de tapias, cimientos de antiguas edificaciones y alguna pequeña represa”, señala el proyecto. Cerca, en la Huerta de la Arruzafa y en el plan parcial O1, hay vestigios de un sistema hidráulico de origen romano que jugó un importante papel en el pasado. Entre el parador, La Huerta de la Arruzafa y los terrenos de los planes parciales O1, ya urbanizado y con viviendas, y O2, pendiente de desarrollo, estuvo la al-Rusafa de Abderramán I.

La obtención de los terrenos ha sido compleja, ya que acabó en el juzgado. El Ayuntamiento finalmente ha pagado 1,5 millones por ellos. El proyecto de El Patriarca se impulsó durante el anterior mandato, cuyo equipo de gobierno decidió incluirlo en el programa Edusi, del que hay una obra a punto de empezar, la del Parque de Levante, y varias en concurso, entre ellas, las del eje peatonal del Realejo.

Este parque periurbano formará parte del anillo verde que Urbanismo quiere poner en uso entre Levante y Poniente, con el Parque de Levante, la Asomadilla, El Patriarca, el Parque del Canal y el Parque del Flamenco, de forma que Córdoba cuente con "más metros cuadrados de zona verde por habitante del país", según señala el presidente del organismo municipal, Salvador Fuentes. De este proyecto destaca Urbanismo, además de la plantación de árboles y arbustos y del mirador natural que se habilitará, el control del arroyo del Patriarca con un muro de contención natural que evitará inundaciones de la urbanización colindante.