-¿Cree que ha afectado más que a otros sectores la crisis del covid-19 al comercio de cercanía y por qué?

Pienso que nos ha afectado a todos. Mi negocio, de comercio de textil, está bastante más afectado que otros, ya que me dedico a ceremonia y eventos y al no haber o estar todos estos acontecimientos muy limitados, sinceramente, se está notando bastante en las ventas. Hay que tener en cuenta que el estado de alarma nos cogió en plena temporada de Semana Santa y comuniones, con toda la mercancía adquirida en tienda y, sin embargo, no le hemos podido dar salida.

-¿Cuáles son los principales problemas que observa en el comercio de cercanía en la actualidad?

-La gente le tiene miedo a salir, aun estando todos los comercios preparados con todas las medidas de desinfección e higiene que la situación requiere. Hay mucho temor a contagiarse. Pienso que en el comercio de cercanía es donde el cliente se puede sentir más seguro, a diferencia de las grandes superficies, donde hay más aglomeraciones . Además, nos adaptamos a sus necesidades y exigencias y tenemos algo que es muy importante: el trato personalizado. Quizás hay más gente que compra por Internet por el hecho de no salir a la calle pero nunca va a ser igual, ya que el trato, la confianza y la relación con el cliente que tienes en el comercio de cercanía no es comparable con la compra online.

-¿Qué acciones cree que se deben adoptar desde las administraciones?

-Nos están ayudando bastante. Quizás darle más publicidad al comercio de cercanía, que lo necesita más que nunca, ya que siempre el pequeño comercio está más perjudicados que las grandes superficies. En estas situaciones el chico se hace más chico y el grande se hace más grande. Por otro lado, los bonos descuento han tenido mucha aceptación y ha motivado mucho al cliente y espero que se puedan solicitar también de cara a la campaña de Navidad, ya que se han repartido en descuentos unos 20.000 euros entre los comercios, con el beneficio que ha dado a los clientes. Ha sido un alivio en toda la situación difícil que estamos atravesando.

-¿Qué importancia debe tener el comercio de cercanía para Córdoba?

-Un pueblo sin sus comercios no es un pueblo, no tiene vida. Es la alegría de un barrio, de una ciudad, la interacción con los demás, salir a la calle -tan unido a nuestra cultura andaluza-, es todo. Tenemos que cuidar mucho a nuestro pequeño comercio ya que es un motor muy importante de la actividad económica de una localidad. También a Puente Genil viene muchos pueblos de los alrededores. Este año tenemos la esperanza puesta en la campaña navideña, ya que con el alumbrado nos visita mucha gente.