El coronavirus coronavirusestá afectando también a la actividad del aeropuerto de Córdoba, donde hace un año la escuela finlandesa Patria se instalaba para impartir cursos de piloto que abrían nuevas perspectivas para unas instalaciones infrautilizadas a pesar de tener una pista recién ampliada. Un año después, la empresa, que confiaba en que 2020 y 2021 fueran años decisivos para su implantación en la ciudad y su expansión, se ha encontrado con las limitaciones que impone la pandemia y se ha visto obligada a adaptar sus planes a la misma. Al inicio de la pandemia, la escuela tuvo ya que interrumpir las clases y volver a Finlandia.

[Sigue aquí en directo las últimas noticias sobre el coronavirus en Córdoba]

El encargado de este centro de formación de Patria Pilot Training, Michael Hirvonen, ha explicado a este periódico que, «debido a la situación actual de Andalucía y Córdoba, hemos decidido retrasar el inicio de nuestro curso uno o dos meses». La empresa quiere asegurarse de que la situación no empeora antes de traer a los estudiantes desde Finlandia y al resto de personal. Su idea es, si la situación mejora, empezar los cursos de pilotos en octubre. No obstante, tanto él como otros dos empleados de Patria, se encuentran en estos momentos en Córdoba «trabajando para que la escuela sea lo más segura posible». Durante el tiempo en el que la escuela de formación de pilotos ha estado cerrada en el aeropuerto de Córdoba, las clases han continuado en Finlandia.

Para el próximo curso, que en una situación normal debería iniciarse a mediados de septiembre, hay 18 alumnos matriculados, siete más que el año pasado. Los planes que anunció Patria antes del coronavirus eran pasar de 11 a un centenar de alumnos y de tres aviones, que son los que ha estado utilizando, a una decena. Para la escuela ha sido muy importante la implantación del sistema de vuelos nocturnos en el aeropuerto, que puede utilizarse desde final de enero, lo que permite operar por la noche. Patria forma pilotos que trabajan después en aerolíneas internacionales como Turkish Airlines, Finnair, Air Astana y Nordic Regional Airlines. Patria suele enseñar a pilotar a estudiantes que acuden a título particular -a los que aprender a dirigir un avión les cuesta 120.000 euros- o a los que llegan a través de las aerolíneas con las que tiene acuerdos, que sufragan parte de la formación y que les proporcionan empleo.