Las autocaravanas tienen cada vez más adeptos en Córdoba, donde se han duplicado en un año. Según datos facilitados por la Asociación Española de la Industria y Comercio del Caravaning (Aseicar), en Córdoba se ha pasado de 45 matriculaciones en el 2018 a 75 en el 2019. No obstante, a pesar del fuerte incremento, la cifra es pequeña en comparación con otras provincias andaluzas. De las 1.478 autocaravanas y campers matriculadas en Andalucía en el 2019, 393 están en Sevilla; 347, en Málaga; 250, en Granada; 223, en Cádiz; 113, en Almería; 75, en Córdoba; 45, en Huelva, y 32 en Jaén. En todo el país se matricularon 8.903 autocaravanas en el 2019. Aseicar considera que el «caravaning es la mejor opción vacacional por la seguridad e independencia social» y una de las fórmulas más adecuadas para este verano marcado por la pandemia del coronavirus. Aseicar ha implantado incluso el sello caravaning anti covid para sus empresas asociadas, que se dedican a la venta y al alquiler de estos vehículos, con el objetivo de garantizar las medidas de seguridad.

La asociación nacional Plataforma de Autocaravanas Autónoma (PACA), cuyo secretario es Pedro Miguel González Sánchez, que reside en Córdoba, considera que el aumento de las matriculaciones indica que «el sector del caravaning ha llegado por fin a nuestro país para quedarse». Además, piensa que «las autocaravanas comienzan a valorarse como una alternativa segura en esta crisis sanitaria para disfrutar de las vacaciones», ya que «permiten estar al aire libre y mantener la distancia social sin empeñar la experiencia de disfrutar del viaje». Aunque no hay datos provincializados y recientes sobre el número total de vehículos de este tipo que hay en Córdoba, indica que hace tres años había más de 500.

No hay que confundir caravana con autocaravana. La primera es un vehículo sin motor que para circular necesita de otro que lo remolque. Sin embargo, y según explica González, una autocaravana o camper -por fuera tiene aspecto de furgoneta- es «un vehículo vivienda totalmente autónomo y cuenta con depósito para el agua limpia, otro para el agua una vez utilizada (ducha, lavabo y fregadero) y un wáter químico». Cada dos o tres días, indica, necesita «ir a un punto para vaciar las aguas grises y las negras y para rellenar el depósito de agua limpia», tarea que se realiza en los puntos de vaciado ecológico, que se pueden encontrar a través de aplicaciones. González explica que los municipios que cuenten con estos puntos son potenciales receptores de este turismo.

La plataforma estima que «no se requieren grandes infraestructuras, ni terrenos o explanadas exageradas», para dar servicio a este tipo de turismo, sino solo «un espacio para cambiar las aguas», una zona de aparcamiento y que la plataforma de desagüe esté conectada con el sistema de depuración de aguas. Es más, asegura que «una vez realizada la inversión inicial», el gasto para un ayuntamiento «es mínimo», al ser el agua el único consumo.

EL CÁMPING DE CÓRDOBA

El Ayuntamiento baraja como una de las posibilidades de futuro para el camping de Córdoba, que está cerrado, que albergue un área para autocaravanas, idea que apoya la asociación, que considera que hacen falta más. González Sánchez piensa que aunque la ronda Norte pase por la parcela del camping, «se puede llevar el proyecto a cabo», ya que esta vía puede «facilitar el acceso y, con las medidas correctoras oportunas, amortiguar el posible ruido del tráfico nocturno».

A juicio de esta plataforma, el autocaravaning es un turismo «ecológico», permite realizar la recogida selectiva de residuos, no implica mayor consumo de combustible y, «al depender de un depósito de agua de unos cien litros», el turista tiene mayor conciencia del consumo. A esto se une que «eléctricamente somos autónomos porque el motor carga la batería al realizar los desplazamientos» y se utiliza una placa solar en las paradas, señala. Además, añade, la calefacción «requiere muy poco consumo» por la pequeña superficie y por los aislamientos mayores.

Pedro Miguel González Sánchez. A. J. GONZÁLEZ

La plataforma considera que esta fórmula de viaje es «motor del comercio local», ya que los turistas que la utilizan consumen en los establecimientos existentes. Recuerda que el Libro Blanco del Caravaning fija el gasto medio diario entre 70 y 102 euros. La plataforma niega que la autocaravana sea competencia para un cámping o un hotel y asegura que «puede convertirse en una importante fuente de ingresos para las localidades».

El secretario de la asociación aclara que hay que tener en cuenta que no es lo mismo aparcar que acampar. Una autocaravana está aparcada aunque tenga ocupantes en su interior mientras no se desplieguen elementos fuera. De ahí que estos vehículos puedan estacionar en la vía pública. Otra cosa es acampar y pernoctar, para lo que las normas varían de una zona a otra. Acampar implica sacar al exterior toldos, sillas y mesas, colocar elementos estabilizadores, vaciar el depósito y hacer vida dentro y fuera del vehículo. Mientras que la acampada libre en España está prohibida, «la pernocta, no», señala, excepto en espacios protegidos. «El interior de un vehículo privado es, eso, un espacio privado en el que mientras esté correctamente estacionado podemos comer, hablar por teléfono, jugar al parchís o, sí, también dormir sin ser sancionados», explica González.

Según sus cálculos, una autocaravana nueva cuesta entre 50.000 y 100.000 euros y una camper, más de 40.000, mientras que si el vehículo es de segunda mano y tiene unos cuatro o cinco años vale más de 35.000. En cuanto al alquiler, oscila entre 80 y 120 euros al día en temporada baja y entre 150 y 200 en alta.

Según Aseicar hay 1.000 áreas de servicio repartidas por todo el país pero hacen falta el doble. La asociación estima que el precio medio del alquiler va de 150 a 190 euros en temporada alta y de 90 a 150 en baja. La ruta media es de 17 días y el gasto diario, de 150 euros.

HAY UNA DECENA DE ÁREAS EN LA PROVINCIA

ENTRE 10 Y 15

La asociación PACA contabiliza entre 10 y 15 áreas en las que se puede aparcar y cambiar aguas y doce cámpings para acampar. En las áreas ubicadas en el eje de la A-4 y A-45 echa en falta señalización con los recursos turísticos. En la capital cita la del cementerio de La Salud, aunque indica que muchos autocaravanistas pasan la noche junto al estadio, y la de El Higuerón, que tiene un recinto vigilado para estacionar. En el eje de la A-4 están también la de Pedro Abad y el camping de La Carlota, mientras que en el de la A-45 se encuentran las de La Rambla, Montilla y Rute.

POR COMARCAS

La asociación PACA tiene conocimiento de áreas en Villanueva del Duque y Alcaracejos, dentro de Los Pedroches. Además, en Pozoblanco, aparte del cámping, el Ayuntamiento prevé un área en colaboración con la PACA, según explica el secretario, que afirma que en proyecto está también la de Villanueva de Córdoba. En cuanto al Guadiato, contabiliza un área privada en Peñarroya. En el Valle del Guadalquivir están las de La Carlota, Palma y Hornachuelos, mientras que en la Campiña Sur, las de La Rambla y Montilla. En relación con el Guadajoz-Campiña Este, detecta en Castro y Baena. Por último, en la Subbética, cita las áreas de Priego y Doña Mencía.

SUGERENCIAS

La asociación PACA considera necesario aumentar el número de áreas existentes e interconectarlas y asegura que entre ellas no se hacen la competencia sino que este tipo de turismo «se potencia con la oferta». A su juicio, las de la autovía A-4 son «lugares de parada y tránsito más que de parada y exploración turística» y deberían servir para informar de la existencia de una red provincial de áreas y dirigir al turista a otros destinos. En las áreas de Hornachuelos, Doña Mencía y Cabra aconseja ofertar actividades deportivas.