Tal y como temían los vecinos, la piscina municipal de la Fuensanta no se podrá abrir el próximo 10 de julio, como se acordó tras posponer ya una vez la reapertura de la fecha inicial acordada antes de la pandemia, que se había fijado para el 8 de junio. la nueva fecha de apertura es el 17 de julio.

El concejal de Infraestructuras, Manuel Torrejimeno, se reunió el viernes pasado con vecinos del barrio de La Fuensanta para abordar "una solución de urgencia" para la reapertura de las instalaciones, después de que los vecinos denunciaran públicamente su temor de que no fuera posible cumplir la fecha del 10 de julio debido al mal estado que presentaba la piscina una semana antes.

Mientras la piscina de la calle Marbella sí se abrirá este año el 10 de julio, la de Fuensanta tendrá que esperar otra semana más y lo hará el día 17 porque "es necesario hacer nuevas reformas", según fuentes municipales.

Los vecinos han mostrado su malestar por la falta de previsión del Ayuntamiento después de un año entero de reuniones y propuestas vecinales para cumplir los plazos y se quejan de que se use la pandemia "como excusa" para no tener las tareas hechas. Por su parte, fuentes municipales indicaron el viernes pasado que las ampliaciones del estado de alarma impidieron la contratación de la empresa encargada del mantenimiento y reforma de la piscina y que, mientras la de la calle Marbella, ha podido adecuarse porque "estaba en mejores condiciones", la de Fuensanta tendrá que esperar.

El precio de los abonos

Confirmado el retraso, los vecinos han difundido por redes sociales un mensaje dirigido al Ayuntamiento en el que les pide que, ya que el número de días de disfrute de las instalaciones se va a reducir, pasando de 95 a 56 días, "lo lógico es que se produzca una rebaja en el coste de los abonos proporcional al recorte". En concreto, según las cuentas de los vecinos, en lugar de 221,8 euros debería costar 130,74 euros, restando así el mes que se les ha restado.