El alcalde, José María Bellido, durante la respuesta a la tanda de preguntas que han realizado participantes en el encuentro digital de Diario CÓRDOBA sobre el balance de un año de gobierno local, se ha comprometido en abordar con el Consejo del Movimiento Ciudadano «antes del verano», y «con la legislación andaluza» en la mano, la situación de las parcelaciones, así como la creación de la oficina que demandan este órgano de participación y los parcelistas que forman parte de la comisión de periferia. El presidente del CMC, Juan Andrés de Gracia, ha censurado que ni la legalización ni la dotación de servicios a las parcelaciones avanza y ha pedido explicaciones sobre ese hecho. Bellido ha reconocido que «tenemos un debe» en cuanto a parcelaciones con el CMC, al que ha agradecido su colaboración, aunque ha advertido de las dificultades técnicas que hay.

El alcalde se ha referido, en respuesta a José Luis Garrido, a las previsiones en materia logística, donde ha subrayado los pasos que el Ayuntamiento está dando «con la Junta para reactivar el parque logístico» posibilitando la venta de parcelas. Bellido espera dar «muy pronto buenas noticias» sobre «operadores logísticos interesados en la adquisición de esas parcelas» una vez que se puedan vender. Además, y «a corto plazo», el gobierno local tiene en mente «desbloquear proyectos privados de innovación urbanística ligados al desarrollo de suelo logístico» para disponer de grandes parcelas (en referencia a El Álamo). En cuanto al turismo, los planes son una campaña de promoción nacional.

Por otro lado, el Ayuntamiento está tomando medidas por si se produce un rebrote de coronavirus. En respuesta a Ricardo López Crespo, que ha preguntado si hay un plan especial previsto, el alcalde indica que se hará lo que digan el Gobierno central y la Junta. Bellido señala que se ha producido «un avance brutal en materia de transformación digital» y eso es importante porque «aunque cierre físicamente el Ayuntamiento, no cierra en el funcionamiento»; se está llevando a cabo un aprovisionamiento de mascarillas; y se prevé la posibilidad de «confinamientos muy localizados» que permitan cerrar bloques de viviendas, calles y barrios, aunque hay que «afinar los mecanismos» aún.

En las palabras de Bellido no ha faltado una demanda que durante el estado de alarma ha dirigido más de una vez al Gobierno central, la de que «nos deje usar el dinero ahorrado», los 22 millones de superávit. El alcalde confía en que medidas «paliativas» como el ingreso mínimo vital, aprobada por el Gobierno central, sirvan para «destensar» la situación de las ayudas sociales, ya que «los ayuntamientos durante más de dos meses hemos asumido la atención social». Además, el alcalde ha solicitado que «igual que a las comunidades se las ha financiado con 16.000 millones, los ayuntamientos recibamos la misma proporción que corresponda al gasto público que tenemos», es decir, 5.000 millones.