Dos colegios y un instituto, los CEIP Obispo Osio y Alcalde Jiménez Ruiz y el IES Guadalquivir, abrirán sus puertas este mes de julio en la capital para acoger a los niños que participen en el Plan de Refuerzo Estival, convocado por segundo año por la Consejería de Educación, en lo que supondrá un «banco de pruebas» o «ensayo general» en cuanto a medidas higiénico sanitarias y de brecha digital a tomar de cara a la reapertura de todos los centros en septiembre, con el inicio del curso escolar 2020-21. Así lo han puesto de manifiesto las directoras de estos tres centros educativos, que se muestran entusiasmadas de poder ofrecer a sus alumnos la posibilidad de «reengancharse» de forma presencial al sistema educativo, por 15 días o un mes, y que este programa les sirva de «ensayo general» para el inicio del próximo curso.

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Este año han sido los propios claustros de cada centro los que han votado si participar o no voluntariamente en el programa. Así pues, en la provincia son 46 colegios e institutos los que han decidido dar el paso, de ellos solo tres en la capital, mientras que a nivel andaluz son 378, 144 más que el curso anterior. El año pasado participaron en el programa dos colegios y dos institutos de la capital, elegidos por la Consejería de Educación, que este año han decidido no volver a solicitar el programa. En la provincia, cabe destacar el caso de Lucena, que contará con 4 centros, más que la capital, o Posadas, con tres. En lo que respecta a las capitales andaluzas, salvo Jaén con dos o Granada con tres, el resto supera a Córdoba, destacando Málaga con 14 colegios e institutos dispuestos a participar, o Cádiz con 8 y Sevilla, con 9.

Directores y profesores de distintos centros consultados han comentado a este periódico que han sido varias las causas para no solicitar el programa de refuerzo en julio. En primer lugar, la incertidumbre ante la situación de crisis sanitaria que, si ha impedido volver a clase en junio, en julio no se sabe qué va a pasar; el hecho de abrir el centro para que se mezclen niños y profesores de distintos colegios e institutos con diferentes niveles; algunos están en obras; las altas temperaturas, «y el cansancio que ya acompaña a alumnos y profesores» en este raro final de curso.

Una vez concluido el plazo de los centros para apuntarse, la fase de inscripción del profesorado finalizó ayer, 31 de mayo, y después, del 12 al 18 de junio, tendrán de plazo los alumnos para solicitarlo, un proceso que concluirá sobre mediados de junio, cuando estarán todos los datos definitivos, según la Consejería de Educación.

María José Fernández, directora del CEIP Obispo Osio, en el distrito Noroeste, un centro de compensatoria que lucha cada día por reducir el absentismo escolar, explica que han solicitado el programa este año por primera vez, con todo el apoyo del claustro, salvo dos votos en contra, y con cuatro profesores dispuestos a participar. «Para nuestros alumnos, la presencia física es importante, ya se nos están descolgando del sistema cada vez más, están desmotivados, necesitan el vínculo físico con sus profesores», admite. Y entiende que, aparte del refuerzo del aprendizaje, «va a ser más a nivel psicológico, volver a la normalidad, lo que puede crearles un equilibrio afectivo y psicológico», después de casi tres meses en casa. Además, la directora del CEIP Obispo Osio, que dice tener 9 aulas con aire acondicionado, gracias al AMPA, destaca que «tenemos también gran interés en empezar a practicar todas las medidas preventivas de higiene y seguridad en julio porque será el ensayo general de lo que va a ocurrir en septiembre».

Carmen Sánchez, directora del CEIP Alcalde Jiménez Ruiz, en el barrio de la Fuensanta, señala que lo han solicitado porque «muchos niños se nos están quedando atrás por la brecha digital», y un mes o 15 días «es un tiempo de oro para poder recuperar un poco, también con la incertidumbre de qué va a pasar el curso que viene». Tres profesores del centro van a participar y espera que los tutores animen a las familias a apuntar a los niños que van peor. «Ya hay muchas familias de otros colegios que nos están preguntando para inscribirse», dice.

El único instituto de la capital que abrirá sus puertas en julio para este programa será el IES Guadalquivir, ubicado en el distrito sur, en el barrio del Guadalquivir. Su claustro votó por mayoría que sí al programa y cuatro profesores han solicitado participar en él. «Nuestro centro es de compensatoria y es especial y se está trabajando mucho para que el instituto se normalice y no queremos dejar de darle todas las posibilidades al alumnado», afirma Inmaculada Mediavilla, su directora. Mediavilla entiende que tras el confinamiento, «los alumnos necesitan socializar, volver a hablar con sus compañeros y profesores» y, además, que «por lo menos este verano tengan alguna actividad lúdica y emocional». Respecto a las medidas a tomar, en cuanto a distancia social, mascarillas y geles, «veremos si esto funciona y será un ensayo general de cara a septiembre».