Si el comercio ha empezado de manera tímida la fase cero comerciomanera tímidade la desescalada en el confinamiento por esta crisis sanitaria por el coronavirus que ha planificado el Gobierno central, la hostelería ha tenido un comportamiento similar y apenas se ha sumado a la posibilidad que tiene desde este lunes, y hasta la etapa uno, de ofrecer comida a domicilio o de servirla a clientes que acuden al local a recogerla previo pedido. Basta con dar un paseo por la ciudad para percatarse de que la realidad ha variado muy poco o casi nada en este sector, que opta por esperar a la fase uno, en la que, al menos, puede abrir las terrazas con un grado de ocupación del 50% y otros condicionantes.
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Aún así, hay restaurantes que desde este lunes se han decidido a elaborar platos para los clientes que se lo han pedido, que se han desplazado hasta allí para recoger la comida. Este es el caso del Mesón San Basilio, donde se ha vivido una jornada "tranquila", según explica Eliseo Onetti, en la que han tenido tres pedidos para llevar a domicilio, servicio que presta desde hace una semana, y otros tantos para recoger en el local ubicado en el Alcázar Viejo. El plato del día de este lunes ha sido la fabada, aunque también hay quien solicita croquetas, calamares, boquerones al limón, rabo de toro o carrillada.
El restaurante La Cuchara de San Lorenzo lleva, a través de una empresa, comida a domicilio desde el pasado fin de semana, aunque este lunes también da la posibilidad de recogerla en el local. "Estamos contentos porque no esperábamos tanta aceptación", asegura Francisco López, que explica cómo han tenido que adaptarse a esta nueva situación con, por ejemplo, cambios en la carta. "Es como empezar de cero después de catorce años de negocio", indica. Salmón, paté de perdiz, pescados y mariscos son algunos de los productos que los clientes podrán encontrar aquí.
Aunque lleva dos semanas entregando sus platos a domicilio, desde el jueves Casa Pepe de la Judería abrirá sus puertas aunque solo para que los clientes recojan los platos que han pedido previamente. El restaurante ha unificado la carta con Taberna El número 10 y Casa el Rubio y centralizado la cocina de todos. "Nos tenemos que reinventar a la fuerza", señala Miguel Cabezas. Medias raciones y platos como el salmorejo y el rabo de toro están siendo muy demandados. Algunos de estos negocios se encuentran también en la tesitura de ver qué hacer al tener a parte de sus trabajadores en ERTE.
El restaurante El Pego, situado en Ollerías, lleva repartiendo a domicilio desde el inicio del estado de alarma pero, desde hoy, también atiende entregas en el local. "Hemos tenido tres clientes", explica Ignacio Pérez. Allí las preferencias son el flamenquín de queso y trufa y la carrillada al curry.
Uno de los restaurantes que abren tras más de mes y medio de inactividad es Pizza y Pasta Cuore de Italia, ubicado en el Vial Norte. "Cerramos por seguridad y mañana abrimos porque no podemos más" con los gastos, indica Manuel Salvador, que confía en que el servicio tenga aceptación.
El presidente de Hostecor, Francisco de la Torre, lamenta que siguen "las mismas incertidumbres que al principio" y que continúan con "las mismas dudas "laborales, fiscales y de cuándo habrá aperturas interprovinciales". De la Torre y el secretario general de Hostecor, Jesús Coca, participaron ayer en un encuentro virtual con la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, como representantes de la patronal andaluza y cordobesa junto a Hostelería de España. La reunión sirvió para trasladar las necesidades del sector de cara a la desescalada.
