La llovizna que ha acompañado a la jornada de este domingo no ha frenado la primera salida de muchos niños cordobeses a la calle, que "estaban deseando" dar un paseo después de permanecer seis semanas confinados en sus viviendas a causa de la pandemia de coronavirus.

La orden de Sanidad que les permite abandonar sus hogares una vez al día acompañados por un adulto beneficia a 114.405 menores de hasta 14 años en la provincia. Pese a que la cifra es abultada, la subdelegada del Gobierno en Córdoba, Rafaela Valenzuela, ha informado a este periódico de que el día ha transcurrido con "relativa normalidad" y "no ha habido incidentes dignos de mención salvo en Córdoba capital, que han adornado una calle y ha habido una mayor concentración de personas, que tengamos noticia".

Valenzuela se ha referido así a la batalla de las flores celebrada en Don Carlos Romero, en la que los vecinos han adornado sus balcones y la vía pública, y han podido disfrutar del cante en vivo de María del Mar Martos, presidenta de la asociación Peina y volantes.

Se da la circunstancia de que esta vía se encuentra frente a una salida de los jardines Elena Moyano Madre Coraje (conocidos como de los Teletubbies), por lo que las personas que abandonaban el parque se han visto sorprendidas por la música y la decoración, y algunas se han detenido a disfrutar del evento.

Valenzuela ha explicado que agentes policiales que patrullaban en un vehículo han recordado a los transeúntes que deben evitar las aglomeraciones para no exponerse a un posible contagio de covid-19.

En este sentido, a diferencia de lo ocurrido en otras ciudades de España donde los incumplimientos de las normas de seguridad han generado polémica, la subdelegada del Gobierno ha destacado que, según el balance facilitado por la Policía Nacional, la Guardia Civil y las policías locales, en Córdoba no se han efectuado denuncias relacionadas con la presencia de los pequeños en la calle y, "en general, la jornada ha sido bastante tranquila".

Valenzuela ha mostrado su alegría por que, "por fin, nuestros niños hayan podido salir a las calles aunque el día este nublado, que las familias hayan perdido los miedos y que se den cuenta de que por salir una hora no pasa nada".

Sin embargo, ha insistido en la obligación de "guardar todas las medidas de seguridad" y ha señalado que "no hay que perder el respeto al virus en ningún momento. Podemos pecar de exceso de confianza y esto es lo que hay que evitar para seguir transitando hacia la desescalada. La responsabilidad de cada uno es fundamental para que nada tenga vuelta atrás y en el caso de los niños recae en los padres", ha subrayado.

No obstante, también ha manifestado que "Córdoba ha sido modélica hasta ahora y espero que lo siga siendo en las siguientes fases de desescalada". Consultada por si esta podría ser una de las primeras provincias en la que se vayan relajando las medidas para frenar la propagación del covid-19, ha admitido que "no está en mi mano poder decir eso. Es muy precipitado, hay que esperar para ver cómo avanza la epidemia en los próximos días", ha concluido.

Labor informativa y preventiva

De su parte, el concejal de Seguridad en el Ayuntamiento de Córdoba, Miguel Ángel Torrico, ha puesto de relieve la importancia de las medidas de seguridad en la salida de los niños a la calle y ha apelado a la responsabilidad de los cordobeses para su cumplimiento.

A través de un comunicado, ha recordado que el Consistorio ha reabierto los parques y otras zonas verdes de la ciudad, después de 43 días cerrados por la declaración del estado de alarma, para que los más pequeños puedan disfrutar de estos espacios.

La Policía Local ha observado una "escasa afluencia de público" y ha valorado que "la mayoría de las familias cumplían con las restricciones establecidas en la orden (del Ministerio de Sanidad)".

En esta línea, los incumplimientos detectados por los agentes se han debido, en buena medida, a la "falta de información o de entendimiento de la orden", por lo que estos han realizado labores informativas y preventivas con los ciudadanos.

Dos niños juegan con sus patinetes en un espacio verde de Córdoba. / CHENCHO MARTÍNEZ

Los más madrugadores han regresado en las primeras horas de la mañana a los espacios de siempre, los parques (las zonas de juegos infantiles permanecen cerradas) y otros lugares de uso público que invitan al esparcimiento, para disfrutar del aire puro y de un rato de actividad a pie, en bicicleta, con patines y patinetes.

Las familias han optado por emplear distintos medios de precaución para evitar el contagio del covid-19, que han ido desde la simple prudencia hasta el uso de viseras que cubren la cara, mascarillas o gel desinfectante si los niños tocaban alguna superficie.

En distintos casos han coincidido en apuntar que no llevarían a sus pequeños a un supermercado u otros establecimientos, pero sí aprueban una salida corta empleando las medidas de seguridad necesarias para prevenir posibles infecciones por el virus SARS COV 2.

En este sentido, los padres consultados por este periódico han subrayado que los pequeños estaban "loquitos" por salir de casa e incluso José Ortega, padre de Adriana (un año y medio) y Emma (tres años y medio), ha explicado que "estaban como locas, parecía que venían los Reyes Magos, se han despertado preguntado una y otra vez cuándo salíamos".

José ha admitido que esperaba que el permiso para pasear se hubiera aprobado antes. En este sentido, en referencia a las medidas adoptadas por la crisis sanitaria ha comentado que "los enanos lo pasan mal y se van poniendo más serios con los días, son pequeños para entenderlo".

Por su parte, Ricardo Lenzano ha acudido a los jardines de la Agricultura (conocidos como de Los Patos) junto a sus hijas Carmen, de 13 años de edad, y Elena, de 8 años, y el perro de la familia, y ha señalado que "a las 10.00 horas estábamos ya en la calle". Consultado por la llovizna, ha indicado que "había que salir de todas formas, porque cualquiera les dice que no".

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Elena y Carmen pasean por los Jardines de la Agricultura. / CHENCHO MARTÍNEZ

En la misma línea, Sandra Fernández, madre de Delia (dos años y medio), y Claudia (un año y medio), ha indicado que "esta mañana se han despertado temprano, porque ayer nos acostamos con la cosa de que hoy salían a la calle".

En su paseo, han podido ver a los abuelos en el balcón. Sandra ha precisado que uno de sus objetivos ha sido evitar coincidir con un elevado número de personas en este parque y por esto lo han visitado en las primeras horas del día.

En la avenida de la Libertad (conocida como Vial Norte), María del Pilar Dolader ha paseado con su hija, Olivia (cuatro años de edad), y ha reconocido que han tomado "muchas precauciones", porque "tengo algo de miedo en el cuerpo". Esta madre ha apuntado que su pequeña ha vivido "más o menos" bien el confinamiento, "pero en la última semana se estaba empezando a complicar todo", ha matizado.

De otro lado, Daniel Fatela, padre de Daniel (tres años), ha opinado que "hacía falta un poco de esparcimiento y poder tomar aire puro, manteniendo la distancia social y las precauciones".

Francisco García ha salido con su hija Alejandra (12 años) y ha destacado que los niños están "loquitos perdidos" con la idea de poder ir a la calle después de un mes y medio sin hacerlo. La suya ha sido una de las muchas familias que ha tenido que dejar a otro hijo en la vivienda, dado que en su caso tiene 15 años de edad.