La Policía Nacional, la Guardia Civil y las policías locales de los diferentes municipios de Córdoba realizarán mañana domingo una labor "especial" de vigilancia para hacer cumplir las medidas del estado de alarma decretado para gestionar la pandemia de coronavirus en el primer día de regreso de los niños a la calle.

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En el caso concreto de esta provincia, son 114.405 los menores de hasta 14 años de edad a los que el Gobierno de España permite realizar paseos cortos acompañados por un adulto.

Esta medida, sin embargo, ha sido valorada de forma desigual por los profesionales y por las familias, que mantienen opiniones a favor y en contra de que salgan de sus viviendas mientras que el resto de la población continúa limitada para frenar la propagación del covid-19.

Fuentes de la Subdelegación del Gobierno han detallado a este periódico que los agentes patrullarán la vía pública "para controlar que se cumple la orden"orden" publicada este sábado por el Ministerio de Sanidad en el Boletín Oficial del Estado, que recoge medidas para evitar el contagio por el virus SARS COV 2 en los paseos de los niños.

Estas fuentes han destacado que mañana actuarán agentes vestidos de paisano y uniformados, que acudirán a las calles o los parques, y han recordado que, dado que es domingo y "no debe haber vehículos prácticamente en las carreteras, se hará el esfuerzo en el control de vías públicas".

En este sentido, han recordado que aquellas personas que incumplan las limitaciones establecidas para frenar la propagación de la pandemia podrían ser sancionadas con una cuantía mínima de 600 euros. No obstante, desde la Subdelegación del Gobierno han apelado a la responsabilidad de la ciudadanía, "porque, al final, lo que se intenta es cuidar de la salud".

Las mismas han señalado que en Córdoba "vamos muy bien y esto significa que el confinamiento vaya más rápido", haciendo hincapié en que "si se hace un pequeño esfuerzo, quizá la recompensa sea muy grande".

Las reglas de "los cuatro 1"

En los últimos días se han dado a conocer como "los cuatro 1" las reglas establecidas por Sanidad para permitir que los niños salgan de casa, que son, principalmente, pasear una vez al día; no alejarse más de un kilómetro del domicilio; ir acompañados por un solo adulto y no permanecer más de una hora en la calle.

Además, la orden del ministerio establece que esta actividad se podrá realizar desde las 9.00 horas hasta las 21.00 horas para evitar aglomeraciones y que, junto al mayor que conviva con el niño, también podrá acompañarlo un empleado del hogar.

No obstante, si el adulto es una persona diferente de los progenitores, tutores, curadores, acogedores o guardadores legales o de hecho del menor, deberá contar con una autorización de estos.

Esta persona mayor podrá pasear con un máximo de tres niños por las vías y espacios de uso público, pero no está permitido el acceso a zonas recreativas infantiles al aire libre ni a instalaciones deportivas.

En su salida, deberán mantener una distancia con terceros de, al menos, dos metros y cumplir las medidas de prevención e higiene indicadas por Sanidad para evitar la infección por coronavirus.

Así, la orden establece que "es responsabilidad del adulto acompañante garantizar que se cumplen durante la realización del paseo diario los requisitos para evitar el contagio".

Entre otras cuestiones, aclara que no podrán salir a la calle para pasear "los niños y niñas que presenten síntomas o estén en aislamiento domiciliario debido a un diagnóstico por covid-19, o que se encuentren en periodo de cuarentena domiciliaria por haber tenido contacto con alguna persona con síntomas o diagnosticada de covid-19".

En cuanto a los menores que residen en centros, el mismo documento fija que las comunidades autónomas "podrán adoptar las medidas necesarias para adecuar la aplicación de lo dispuesto en la orden en relación con los niños y niñas que residan en centros de protección de menores, centros habitacionales sociales de apoyo para personas con discapacidad u otros servicios residenciales análogos".

Los perjuicios del confinamiento

Sanidad recuerda en este texto que las condiciones de las viviendas y los estilos de vida "no son iguales en todos los hogares, por lo que la declaración del estado de alarma supone un impacto desigual en la población infantil, afectando especialmente a aquellos niños y niñas que viven en condiciones de vida de mayor vulnerabilidad".

En esta línea, manifiesta que "los desplazamientos permitidos por esta orden resultan necesarios para el bienestar físico y psíquico de las personas menores de edad", y hace hincapié en que el Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas Comité de los Derechos del Niño de las Naciones Unidas"considera que, en la situación de emergencia sanitaria, se debería permitir a los niños y niñas poder disfrutar diariamente de actividades fuera de casa, de manera supervisada y manteniendo las garantías de higiene y distanciamiento social".

Sanidad destaca que la situación de emergencia sanitaria (y el confinamiento que esta conlleva) puede provocar en la población infantil mayor tendencia al sobrepeso y la obesidad; hipotonía; incremento del sedentarismo; irritabilidad; apatía y decaimiento; alteraciones del sueño; incremento de la dependencia de la persona adulta y otros perjuicios.