El hospital Reina Sofía, centro en el que en los dos primeros meses de este año aumentó la actividad trasplantadora un 6,5% (se llevaron a cabo un total de 49 injertos), ha tenido que adaptar como todos los hospitales del país su actividad a la pandemia del coronavirus Esta crisis sanitaria está repercutiendo en un descenso importante en el número de trasplantes y también de donaciones de órganos y tejidos en toda España, aunque a pesar de ello, en el Reina Sofía se han llevado a cabo durante el tiempo de confinamiento al menos dos trasplantes hepáticos y otros dos de corazón, según fuentes sanitarias.

Uno de los coordinadores de trasplantes del hospital Reina Sofía, el doctor José María Dueñas, repasa para Diario CÓRDOBA el momento actual que viven los trasplantes y las donaciones de órganos y tejidos, entrevista que aprovecha este médico intensivista para lanzar un mensaje de tranquilidad y confianza a los pacientes que se encuentran actualmente en lista de espera.

-¿Cómo está afectando el coronavirus al proceso de trasplantes de órganos en la provincia de Córdoba?

-Tal y como ocurre en el resto de España, la pandemia mundial de covid-19 ha hecho mucho más complejo el proceso de donación y trasplante. Aunque los pacientes en lista de espera para un trasplante necesitan de un órgano para sobrevivir y mejorar su calidad de vida, el riesgo de contagio de este virus en la actualidad es alto, dependiendo de las zonas, por lo que hay que valorar muy bien el riesgo-beneficio de seguir un poco más en espera de un trasplante y la posibilidad de contagio una vez trasplantado. Hay que recordar que para evitar que el cuerpo rechace el órgano trasplantado, al no considerarlo como propio, hay que utilizar fármacos que disminuyen las defensas, y esa reducción de defensas es muy acentuada en el primer mes postrasplante. Por tanto, en este tiempo la posibilidad de infecciones es mucho más alto y cuando éstas aparecen la capacidad de defensa del cuerpo es mucho menor.

"Hay que valorar muy bien el riesgo-beneficio de seguir un poco más en espera de un trasplante y la posibilidad de contagio una vez trasplantado"

-¿Cuántos trasplantes se han realizado en Andalucía desde que se decretó el estado de alarma?

-Hasta mediados de marzo, la actividad se mantenía en niveles normales (entre 15 y 20 trasplantes semanalmente en Andalucía) pero en las últimas semanas ha ido descendiendo (cuatro trasplantes en la semana del 9 al 15 de marzo en la región) y un injerto (en la semana del 15 al 22 de marzo). Estos trasplantes han sido de corazón, hígado y riñón. Es muy complejo desarrollar la actividad de donación con normalidad. En cuanto a las donaciones, hasta principios de marzo, se han venido registrando entre 10 y 15 donaciones a la semana en Andalucía. A partir de marzo, se han registrado 8 donaciones (datos hasta el día 22 de marzo). La situación actual nos está obligando a limitar la realización de trasplantes a aquellos pacientes que se encuentren en una situación urgente o tengan grandes dificultades para trasplantarse por sus características. Cada día valoramos la situación y actuamos en consecuencia.

-Por tanto, ¿el virus está frenando también las donaciones?

La actual pandemia covid-19 también ha pasado factura en nuestra área de trabajo. La tasa de donación y trasplante ha descendido no solo a nivel local, sino también en el ámbito nacional, pasando de cifras récord en España con una media de 7,2 donantes y 16,1 trasplantes diarios hasta que se declarara el estado nacional de alarma el pasado 13 de marzo, hasta reducirse de manera importante, con cifras medias actuales de 1,1 donantes y 1,8 trasplantes diarios. Nuestros donantes y trasplantados se encuentran principalmente en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), y son manejadas por intensivistas, especialidad que se ha visto con una alta presión asistencial durante la lucha con la presente pandemia. Por ello, la situación de pandemia por coronavirus ha modificado el normal funcionamiento de nuestra actividad. Unos de nuestros objetivos es garantizar la seguridad de nuestros pacientes, y para ello, se han tomado medidas muy estrictas que impidieran el contagio del virus, descartando donantes o receptores con infección del virus, o aquellos con síntomas compatibles con infección del covid-19. Hay que tener en cuenta que dado lo inespecífico de la sintomatología asociada a covid-19 (como fiebre, tos, cuadro catarral, etc., que es muy frecuente en esta época estacional y en la población general), el número de potenciales donantes se ha reducido mucho. Este estricto cribado de donantes y receptores se ha traducido en un descenso de la actividad. La situación actual del equipo de coordinación de trasplantes es dinámica y cambiante y nos adaptamos a diario para ofrecer la mejor respuesta a nuestros pacientes. Tanto los equipos de trasplantes como el de coordinación estamos haciendo un gran esfuerzo por garantizar los mejores resultados, la máxima seguridad de pacientes y profesionales, en estos difíciles tiempos que estamos atravesando.

-¿Un órgano o tejido de una persona que fallece enferma de coronavirus puede ser trasplantado?

-Desconocemos actualmente si la enfermedad se transmite a través del trasplante. Por tanto, los casos confirmados de covid-19 se descartan como donantes.

"Los casos confirmados de covid-19 se descartan como donantes"

-¿Afectará esta situación de crisis sanitaria a la posición que España ocupaba en el ranking en donaciones en el mundo, tras 27 años liderándolo?

-Todavía es pronto para evaluar el impacto de la pandemia en la actividad. No obstante, la actividad se recuperará con una vuelta a la normalidad tan pronto superemos esta crisis, que esperamos dure lo menos posible.

-Si se han ralentizado los trasplantes, ¿ello implicará un aumento de las listas de espera? ¿Los pacientes que están en espera les están transmitiendo su inquietud?

-Las listas de espera y el número de pacientes en urgencia cambian a diario, pero de momento se mantienen estables. Trabajamos por preservar la actividad de donación y trasplante para responder adecuadamente a las necesidades y fundamentalmente a los pacientes en situación de urgencia. Ellos son nuestra máxima prioridad. La inquietud es normal en estas circunstancias, pero intentamos trasladarles un mensaje de tranquilidad porque son pacientes que controlamos y estamos preparados para atender situaciones de urgencia. Me gustaría además insistir en que los andaluces deben tener confianza en su sistema sanitario, tenemos a profesionales preparados y del más alto nivel para luchar contra esta pandemia.