Miguel Cobos: «Debe haber precios justos que cubran al menos los costes»

-Con esta crisis ha quedado patente que los agricultores y ganaderos aseguramos la producción de alimentos y el abastecimiento de los mercados con productos sanos, de calidad y a precios razonables. La sociedad ha entendido y valorado al sector de la ganadería y la agricultura como prioritario.

-¿Qué enseñanza tenemos que obtener de lo que estamos pasando?

-La vulnerabilidad de nuestra economía, así como de nuestro sistema de producción global. Entiendo que tenemos que apostar en dos direcciones complementarias: por la agricultura familiar vinculada al territorio como garantía de autonomía y seguridad alimentaria e impulsar la internacionalización de nuestro sector como oportunidad de crecimiento de la economía.

-¿Qué cuatro acciones concretas adoptará una vez que finalice el estado de alarma?

- Hay que poner en valor la protección de la agricultura y ganadería familiar. Y debe haber unos precios justos que cubran al menos los costes de producción, algo que venimos reclamando y que nos ha movilizado. En segundo lugar, potenciar una verdadera incorporación de la juventud y la mujer a la actividad agraria. Llevar a cabo una justa y adecuada planificación hidrológica y, por último, la potenciación de modelos agrarios sostenibles

-¿Cómo debe contribuir la iniciativa pública y la iniciativa privada para remontar la situación?

Se hace especialmente imprescindible que las administraciones publicas lleven a cabo una revisión del modelo de Política Agraria Común (PAC) para reorientar los apoyos a la agricultura y la ganadería productivas. Hasta el momento el criterio histórico de reparto de las ayudas ha generado diferentes desigualdades, que ahora deben corregirse teniendo en cuenta criterios más ajustados de empleo, del territorio y en función del tamaño de las explotaciones del sector. También es necesario introducir el pago redistributivo, así como otros mecanismos precisos, como los techos en las ayudas y los pagos decrecientes.