El rector de la Universidad Loyola Andalucía, Gabriel Pérez Alcalá, explicó ayer que «el impacto de las medidas de confinamiento en la formación» de sus alumnos será mínimo» ya que no se han perdido clases, aunque cree que la experiencia «servirá como aprendizaje». Respecto a las prácticas, el rector explicó que «las que no puedan solventar con teletrabajo quedarán pendientes para el próximo curso y, si el alumno acaba en este curso, podrá convalidarlas por algún trabajo de investigación o proyecto lo más próximo a las prácticas profesionales».