Un grupo de hasta 100 cordobeses se ha visto afectado por la situación que se vive en el norte de Italia desde la semana pasada debido a la alerta sanitaria por coronavirus. Tenían previsto viajar hasta la capital de la región del Véneto entre el 29 de febrero y el 12 de marzo en dos fases, una desde el 29 de febrero hasta el 5 de marzo y otra desde el 7 de marzo hasta el 12 del mismo mes. La agencia de viajes que gestiona sus pasajes, en colaboración con la comisión organizadora del viaje, había elegido volar con la aerolínea irlandesa Ryanair, saliendo tanto desde Sevilla como desde Málaga. Ya en Venecia, se alojarían en el Hotel Best Western Continental y visitarían diversas iglesias y museos como parte de su aprendizaje en materia de arte.

Sin embargo, hace una semana las noticias comenzaron a llegar desde Italia: iglesias, museos y espacios públicos proclives a acoger gran cantidad de público habían sido cerrados, el número de infectados crecía y, desde el Ministerio de Sanidad, se recomendaba no viajar a la zona. Todo eso conllevó la propuesta de aplazamiento del viaje tanto por parte de la comisión organizadora como de la agencia, que en todo momento entendió la situación y buscó las alternativas más favorables para sus clientes. Comprendían que el sentido de su viaje, que era puramente académico, se había perdido al ser inaccesibles muchas de las actividades programadas. Los pasajeros, que tenían en mente disfrutar de unos días en Venecia, afirman que quieren seguir adelante con el viaje, pero en otras fechas, debido a que no están dispuestos a exponerse a este riesgo.

El “contratiempo” llegó cuando Ryanair comunicó a la agencia que, para modificar las fechas de vuelo, debían, en primer lugar, abonar ciertas penalizaciones entre las que se encontraban: tarifa de cambio de equipaje (15 euros adicionales por persona), tarifa de cambio de asiento (4,92 euros), cambio de la propia tarifa del vuelo (35 euros) y abono de la diferencia de precio entre los vuelos originales y los nuevos (65,78 euros). En total, 120,67 euros que, desde Ryanair, se obligaba a pagar a todos los pasajeros para cambiar las fechas.

Desde la agencia de viajes cordobesa trasladaron su malestar con las nuevas condiciones y precios que la compañía había propuesto. También criticaron la falta de interlocutores entre las partes y la lentitud de respuesta. No obstante, en las últimas horas la compañía aérea ha contactado con la agencia y ha accedido a negociar los términos de la modificación del viaje. Además, y según informan desde la agencia, el hotel de Venecia en el que se iban a alojar ha decidido no reembolsar ningún tipo de importe por motivos de cancelación de las estancias previstas para estas fechas, teniendo que abonar, además, el doble del precio original al cambiar los días de estadía.