Acaba de fallecer a los 57 años de edad el comparsista cordobés Miguel Amate Escudero, que el pasado año fue el encargado de pregonar la llegada del hijo de Don Carnal a Córdoba.

Ha desaparecido una de las figuras de la fiesta que se inicia en este mes de febrero, dejando un vacío importante entre los amantes de esta tradición. Amate era un reconocido autor de comparsas, entre las que se encuentra su último primer premio en el certamen cordobés con La Piedra Escrita (2016). Pero en su currículum también figuran comparsas cordobesas que acudieron al Gran Teatro Falla de Cádiz, como Los molto contenti (2011) o La comparsa de Córdoba (2012), que alcanzó las semifinales con un tipo que hizo un homenaje a la primera comparsa cordobesa que acudió a la tacita de plata y que obtuvo el premio regional en el 1967.

Miguel Amate ha fallecido tras una larga enfermedad. De hecho, en su pregón del pasado año introdujo un matiz solidario: tanto la recaudación del pregón como la partida presupuestaria que anualmente se destina a tal fin se entregó a la Asociación Española contra el Cáncer para investigación del cáncer infantil.

Su comparsa fue una de las más reconocidas tanto en Córdoba como en el ámbito regional, llegando a actuar en el Gran Teatro Falla de Cádiz, llegando incluso a semifinales del certamen de coplas en el Templo de los ladrillos coloraos.

Sus primeros pasos sobre los escenarios los dio de la mano de Pepe Martínez -pregonero en 2016-, perteneciendo a la comparsa Los dandis del Carnaval, cuando aún no existía el Concurso de Agrupaciones Carnavalescas, que se inició en el año 1983. Pero, antes ya había formado parte del grupo Los rumbeños.

Tres años más tarde fue el encargado de anunciar la fiesta de Don Carnal, donde despegó con una larga y exitosa trayectoria como autor y director. En 1986 presentó su primera propuesta propia: Fantasía cordobesa. En 2011 se formó parte de Los molto contenti.

En el año 2016 volvió con un grupo creado para el Concurso de Agrupaciones, tras la escisión del que creara en la década de los ochenta. Llevó al Gran Teatro Piedra Escrita, una especie de autobiografía carnavalera del autor -nacido y residente en ese rincón de Córdoba-, logrando el primer premio.

En 2018, tras un segundo con La comparsa del loco, optó por no participar de la batalla de coplas. Junto a él crecieron grandes como los hermanos Aranda.