Entendemos que la adaptación de Córdoba a la economía digital es un factor clave para la mejora de nuestra competitividad. Córdoba está trabajando en ello y las distintas convocatorias de fondos europeos, donde la colaboración público-privada resulta fundamental, están impulsando proyectos en el ámbito de las nuevas tecnologías y la digitalización. El tejido empresarial, y sobre todo los nuevos emprendedores, están poniendo en marcha iniciativas de éxito en este campo.

Debemos otorgar a Córdoba el impulso necesario para posicionarla como área logística, por su conexión con la Red de Puertos y Áreas Logísticas de Andalucía y por su papel en los corredores ferroviarios central y mediterráneo, ya que estos se configuran como vías fundamentales para la entrada y distribución de mercancías por Europa, en conexión con el sistema portuario y la red de autovías.

También es importante poner en valor el conjunto de actividades económicas que utilizan como elementos fundamentales los recursos de origen biológico. Se trata de actividades económicas que, al ligarse estrechamente a «lo verde», llevan aparejado el desarrollo de los entornos rurales. Córdoba, por su potencial agroalimentario y su capacidad demostrada en el mundo de la investigación, a través de nuestra Universidad, tiene una enorme proyección.

Y en este contexto, resaltar que es absolutamente necesario el desarrollo de una estrategia común en materia de industria. El desarrollo del sector industrial en Córdoba redundará en la creación de riqueza y generación de empleo estable y de calidad. Junto a otras claves, como continuar promoviendo la internacionalización; la inversión en innovación y el impulso de la formación para garantizar el talento y la capacitación.

Me gustaría significar el notable esfuerzo y las iniciativas empresariales que se están fraguando en campos como la salud, la construcción, el frío industrial, la madera o el metal. Sectores de referencia por su apuesta decidida por la calidad y la innovación. Por supuesto, sin olvidar el peso en nuestra economía del sector agroalimentario, el turismo y la cultura o la joyería.