Los hermanos de la Soledad están llamados este domingo a las 19.00 horas a un decisivo cabildo extraordinario para cambiar de sede canónica. De este modo, de contar con el respaldo de los hermanos, la cofradía abandonaría la parroquia de Santiago para trasladarse a la parroquia de Santa María de Guadalupe (Padres Franciscanos), un templo no ajeno para la cofradía de la Soledad, ya que por su carisma franciscano han colaborado en distintas ocasiones, sobre todo en el colegio, ayudando en la organización de la procesión infantil que anualmente realiza el colegio de los Franciscanos.

Con esta propuesta, la junta de gobierno que preside Francisco López pretende ganar en número de hermanos. Para ello cuenta con el impulso que puede inyectarle el barrio de Levante, mucho más poblado que el de Santiago. Tampoco hay que olvidar que esta zona de Lepanto y Levante no tiene cofradía, ya que las más cercanas son el Rescatado y el Esparraguero y, algo más alejada, La Merced.

A todo esto hay que añadirle la comunidad educativa integrada en la parroquia de Santa María de Guadalupe, que, bien gestionado, puede revitalizar la cofradía.

Por todo ello, la corporación del Viernes Santo pretende que este cambio que ahora plantea sea un nuevo campo de cultivo para los proyectos futuros de la hermandad dotando a la misma de un nuevo impulso.

Cabe recordar que la hermandad de María Santísima de la Soledad fue fundada en la céntrica parroquia de San Miguel en el año 1975. Un año más tarde se trasladaría a la parroquia de Santiago, realizando su primera salida procesional en 1978. Un año después, un incendio en la parroquia de Santiago hizo que la cofradía se trasladara al convento de Santa Cruz y de ahí a la por entonces parroquia de San Pedro. Con el cierre de esta última por obras volvió a Santa Cruz, hasta la reapertura de la parroquia de Santiago en el año 1991.