La inversión extranjera en empresas cordobesas ha mejorado de forma significativa después de la crisis económica, aunque la información del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo pone de relieve la contracción registrada en los nueve primeros meses de este año, cuando se han recibido apenas 2,6 millones de euros frente a los 123,13 millones contabilizados en la provincia en el 2018.

Este último dato es llamativo si se tiene en cuenta que desde el inicio de la serie histórica, en 1993, han llegado a Córdoba 442 millones de euros procedentes de otros países, por lo que la cuantía recibida el año pasado representa prácticamente una tercera parte (el 28%) de lo invertido desde el extranjero en el último cuarto de siglo.

Los 123,13 millones que llegaron en el 2018 también suponen un dato más elevado que el anotado en los ejercicios previos a la recesión. La estadística apunta que en el 2006 se invirtieron 36,15 millones de euros y esta cuantía no se superó hasta una década más tarde, cuando se contabilizaron 40,5 millones de euros.

De este modo, la información facilitada por el Ministerio refleja que las inversiones no tienen una estabilidad a lo largo de los años, aunque coincidiendo con la mejora económica se observan resultados más abultados. Basta con observar que en el 2014, que fue uno de los peores ejercicios de la crisis para Córdoba, la inversión extranjera en sus sociedades fue solo de 0,87 millones de euros.

En cuanto al origen del dinero, este año destacan las inversiones por valor de un millón de euros registradas desde España. Una cuantía que se incluye como capital extranjero porque Comercio ofrece el dato del país del titular último de la inversión y se dan casos en los que españoles crean empresas en otros países y desde ahí invierten en Córdoba, por lo que la inversión procede del extranjero, pero el propietario de la sociedad es un español. En segundo lugar, aparecen los 682.000 euros llegados a Córdoba de Argentina y en tercero, los 500.000 euros procedentes de Andorra.

Los sectores más beneficiados por estas operaciones han sido el agrícola (que ha contado con cerca de 1,3 millones de euros); el inmobiliario (casi 682.000 euros) y la investigación y el desarrollo (en torno a 544.000 euros).

Por otra parte, las fuentes consultadas no han podido precisar el origen o el fin de la cuantiosa inversión foránea contabilizada el año pasado, aunque la información del Ministerio señala que sobresalieron los 103,5 millones de euros procedentes del Reino Unido; 10,5 millones de euros de México (a finales de ese ejercicio, el grupo Verzatec adquirió Polímeros Gestión Industrial); más de 4 millones invertidos desde Italia y 3,5 millones recibidos desde Suiza. Estas aportaciones fueron a la industria de la alimentación, que el año pasado obtuvo el 84% de la inversión extranjera; la química (10,5 millones); la fabricación de maquinaria y equipo (4 millones), y la elaboración de productos farmacéuticos (3,5 millones de euros).

Una subida «sustancial»

El presidente de la Confederación de Empresarios de Córdoba (CECO) y de la Cámara de Comercio, Antonio Díaz, afirma que la inversión extranjera «se ha incrementado sustancialmente en Córdoba desde los últimos tres años». En este sentido, apunta a la adquisición de tierras agrícolas y olivares, donde «Italia está invirtiendo bastante»; la compra de unidades productivas industriales y también la llegada de capital estadounidense, aunque «esto es general para toda España», matiza.

En opinión del presidente de la patronal, «España y Andalucía en concreto, sobre todo, Andalucía en el último año y medio, es un territorio atractivo para la inversión por muchos motivos», a lo que añade que «el capital extranjero busca seguridad, capacidad de expansión y posición geográfica, y Andalucía no deja de ser puerta de entrada al norte de África y a Portugal». Preguntado por la posición de Córdoba respecto a otras provincias de la comunidad, manifiesta que «está en la media, pero depende del sector», ya que en el agroalimentario la supera, pero en el industrial «está mucho más débil que otras provincias que son industrialmente más fuertes». Todo ello, pese a que este es «el talón de Aquiles» de la región, que «necesita muchas más inversiones en industria y logística», asegura.

Díaz subraya que la llegada de capital extranjero es «positiva» para Córdoba y recuerda que «la economía está globalizada». También explica que se ha pasado de un periodo en el que se adquirían empresas en crisis a otro en el que «el capital quiere comprar empresas que funcionen para que funcionen mucho más». Preguntado por los factores que pueden ayudar a atraer inversores, alude a la necesidad de contar con suelo logístico, incentivos fiscales y seguridad jurídica, entre otros.