El Ayuntamiento de Córdoba se ha comprometido, a través de su alcalde, José María Bellido, a continuar los trabajos para la exhumación de las fosas de los cementerios de La Salud y San Rafael, en los que se encuentran enterrados víctimas de la represión franquista, siempre que las otras dos administraciones implicadas, Junta y Gobierno central, sigan adelante con el proyecto inicial.

En una reunión que mantuvo hace unos días con el presidente de la asociación Dejadnos Llorar, Antonio Deza, el regidor cordobés explicitó su respeto hacia el trabajo realizado por el equipo científico en el cementerio de La Salud y mostró su «absoluta disposición» al colectivo de familiares y «la disponibilidad» del Ayuntamiento de Córdoba para dar continuidad a los trabajos.

Bellido indicó, eso sí, que hay que «conseguir el apoyo previo de la Junta de Andalucía, que es la que tiene las competencias en esta materia, y la financiación del Estado», que es lo que se hizo para impulsar la investigación. «Esperemos que el resto de administraciones se sumen para que esto se pueda llevar a cabo y que cada familia pueda encontrar a sus antepasados y a aquellos que están en fosas comunes. Cuentan con toda la solidaridad y el trabajo mío como alcalde, así como el del gobierno local», ha dicho. En varias ocasiones, la Junta ha manifestado su intención de continuar con los trabajos en Córdoba. La última vez fue este verano, cuando explicitó ese apoyo a la Asociación Dejadnos Llorar a través del Servicio del Comisionado para la Concordia.

Cabe recordar que el equipo científico que llevó a cabo los trabajos de investigación arqueológica y antropológica en el cementerio de La Salud entre los meses de enero y abril considera que es «viable» la intervención en determinadas zonas «viable» la intervención y cuadros (la fosa colectiva y los cuadros de La Trinidad, San Demetrio y San Plácido), donde podrían localizarse y exhumarse entre 800 y 1.000 cuerpos. El amplísimo informe que este equipo de antropólogos, forenses e historiadores entregó en octubre a las administraciones que financiaron la actuación, tras la solicitud de familiares de víctimas del franquismo asesinadas en Córdoba e inhumadas en los cementerios de San Rafael y de La Salud, plantea un programa de actuaciones en los dos camposantos a la luz de sus hallazgos y de cara a que las administraciones competentes puedan impulsar actuaciones.

Trabajos de exhumación en el cementerio de Nuestra Señora de la Salud. FOTO: A.J. GONZÁLEZ

Antonio Deza, de Dejadnos Llorar

Antonio Deza, por su parte, recuerda (igual que hizo en su reunión con Bellido) la cobertura legal que tienen sus reivindicaciones: desde la Declaración Universal sobre los Derechos Humanos, a los informes del Grupo de Trabajo sobre Desapariciones Forzadas o Involuntarias de las Naciones Unidas, pasando por las leyes nacionales. «Todo esto para subrayar y dejar claro que lo que queremos es justicia y que este tema sea tratado con dignidad y respeto porque tenemos derecho a que así sea». Antonio Deza reitera que «esto no es un tema de izquierdas o derechas, sino que afecta a todas las personas decentes, demócratas y defensoras del estado de Derecho».

Mientras que administrativamente se dan los pasos necesarios para continuar los trabajos --cuentan con el compromiso dado este verano por la Junta --, los colectivos memorialistas como la Comisión de la Verdad y Dejadnos Llorar están tratando de sumar a esta causa a la Diputación de Córdoba. José Manuel Matencio, presidente de la Coordinadora Andaluza por la Memoria Histórica y Democrática, destaca que otras diputaciones como las de Cádiz, Huelva y Sevilla se han implicado de manera muy activa en las exhumaciones y localización de fosas, y considera que sería muy conveniente que la institución provincial de Córdoba hiciera lo mismo. Matencio considera que el trabajo que deben realizar ahora las asociaciones debe ser el de aunar criterios entre todas las instituciones implicadas. «Esto es una tarea de todos y debemos conseguir que las exhumaciones sigan adelante. No vamos a cejar en esto», comenta.

Caso Renée Lafont y Arehemisa

La Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Aguilar de la Frontera (Arehemisa) está llevando a cabo una importante labor de búsqueda de familiares que está dando sus frutos. De manera paralela a los trabajos realizados en el cementerio de la Salud, esta asociación liderada por Rafael Espino empezó a buscar descendientes de las personas ya localizadas en algunos de los cuadros estudiados como el de San Ramón. Pablo Espino explica que ya se han localizado a miembros de cinco familias relacionadas con los restos óseos encontrados. Entre ellos, los parientes de un funcionario municipal fusilado en Córdoba, Manuel Landrove, que vive en el País Vasco, o una familiar de la periodista francesa represaliada Renée Lafont, cuyo caso despertó el interés mediático (en la actualidad están tratando de que la administración francesa autorice la apertura de la fosa de los padres de la periodista para cotejar el ADN). En todos los casos, es necesario cruzar los datos de las pruebas biológicas, para lo que en Córdoba se hizo una recogida masiva de ADN y desde este verano hay un protocolo, acordado con la Junta, para solicitar dichas pruebas. «Las exhumaciones se hacen para devolver los restos a sus familiares, ese es el fin --comenta Pablo Espino--. El estudio de compatibilidad y la búsqueda de familiares es imprescindible». La labor de Arehemisa está ahorrando, además, recursos económicos a las administraciones.