«Será un palo muy grande cuando vea el cadáver de su madre, tanto para ella como para nosotros», afirmó ayer Priscila Da Silva, hermana de Ana Lucía Da Silva, en referencia a la hija de 16 años de edad de esta mujer fallecida el viernes pasado, presuntamente, a manos de su pareja en Valdeolleros, y a los trámites que aún tiene que realizar la familia.

Priscila recordó que la víctima tiene otros cuatro hijos mayores y nietos en Brasil. Ayer volvió a realizar un llamamiento para que la ciudadanía la ayude a recaudar los fondos necesarios para repatriar el cadáver a su país, precisando que esto costaría unos 5.700 euros de acuerdo con la consulta que han realizado a una funeraria.

Entre otros datos, manifestó que su hermana llevaba 11 meses viviendo en España y comenzó la relación con su presunto agresor hace nueve meses. Sobre este, añadió que «era muy callado» y que «trataba con él lo justo». Por otro lado, acerca del día del crimen también relató que su hija se fue al colegio y Ana Lucía permaneció durmiendo en la cama. Después la avisaron de que no había acudido a trabajar y trató de contactar con ella enviándole un mensaje, pero cuando llegó a su domicilio la Policía le informó de lo sucedido. En este sentido, baraja la posibilidad de que el compañero de su hermana acabase con su vida, incendiara la vivienda y después se diese muerte a sí mismo por el rechazo a la idea de regresar a la cárcel, donde ya estuvo durante años por el asesinato de su esposa.

También admitió que «no sé lo que pudo pasar» y, consultada por otras posibles causas de este crimen, explicó que «mi hermana era un ángel de persona, no creo que la gente pueda decir que ha sido un ajuste de cuentas, no me entra en la cabeza».

Priscila comentó que «mi familia está desesperada en mi país» y adelantó que «mañana (por hoy) se nos vendrá el mundo encima», ya que aún tienen que trascender algunas informaciones como los resultados de las autopsias. En este sentido, insistió en que «pido ayuda» para repatriar el cadáver y adelantó que «si no consigo trasladarla, devolveré el dinero». Acerca de la posibilidad de consultar posibles ayudas en las diferentes instituciones públicas y entidades, subrayó que «no he podido hablar con nadie todavía».

En esta línea, fuentes de la Subdelegación del Gobierno detallaron ayer que en los casos de violencia machista hay que consultar en el consulado de cada país cómo los gestionan y qué recursos ofrecen a las familias, y recordaron que España sí cuenta con un protocolo de actuación.

Las mismas indicaron que Córdoba ha contabilizado tres víctimas mortales a causa de la violencia machista en los últimos 16 años (comenzaron a registrarse en el 2003) y otras dos en solo 11 días. Del mismo modo, abundaron en que si se confirma que Ana Lucía Da Silva murió a manos de su pareja el viernes pasado, se trataría de la primera mujer extranjera que fallece en la provincia en estas circunstancias.

Desde la Subdelegación del Gobierno hicieron hincapié en que todavía es necesario conocer los informes preliminares de las autopsias practicadas tanto a Da Silva como a su pareja, los resultados de otras pruebas periciales y si finalmente el juzgado de Instrucción número 1, en el que ha recaído este caso, se inhibe y pasa al de Violencia de Género, aunque «las investigaciones apuntan a violencia machista como principal hipótesis», puntualizaron.