El Ayuntamiento ya tiene un documento de trabajo, elaborado en colaboración con los agentes económicos y sociales, para movilizarse con la idea de conseguir inversiones para sacar partido a sus potencialidades logísticas. La alcaldesa, Isabel Ambrosio, acompañada del presidente de la Cámara de Comercio, Ignacio Fernández de Mesa; del presidente de CECO, Antonio Díaz; de la secretaria provincial de CCOO, Marina Borrego; y del secretario provincial de UGT, Vicente Palomares, dio a conocer ayer la «hoja de ruta» que seguirán para cumplir con la aspiración de que Córdoba se convierta en puerto seco y que se lleven a cabo las mejoras necesarias en la red ferroviaria que más le beneficia, la central. Se trata de la primera propuesta de trabajo tras el llamamiento que hizo en octubre Ambrosio.

La alcaldesa entregará el documento a los grupos municipales y otros agentes económicos y sociales de la provincia para que se sumen a la plataforma o asociación que están promoviendo y que hará un manifiesto que será aprobado por el Pleno y servirá para reivindicar a todos los agentes implicados las acciones necesarias. Ambrosio quiere tener ese manifiesto para final de enero y celebrar un encuentro ese mes.

La primera propuesta de esa hoja de ruta, que expuso Antonio Sánchez, experto en logística que ha elaborado el documento por encargo del Imdeec, consiste en que Córdoba se convierta en un puerto seco y para ello hacen falta tres actuaciones, modernizar la terminal ferroviaria de El Higuerón, dotar de más actividad al parque logístico de la carretera de Palma, y habilitar una nueva área logística en El Higuerón con capacidad para parcelas más grandes. La idea es reclamar a las administraciones correspondientes las inversiones necesarias.

Otra línea de trabajo serán las acciones encaminadas a lograr la modernización del eje central de los corredores Mediterráneo y Atlántico, que es el que beneficia a Córdoba. Para ello, el Ayuntamiento pedirá al Ministerio de Fomento que diseñe, programe y ejecute antes del 2027 las obras de mejora en el tramo común (Córdoba-Alcázar de San Juan) y en otros necesarios para su adecuado funcionamiento (Bobadilla-Córdoba, Huelva/Cádiz-Sevilla-Córdoba, Alcázar de San Juan-corredor Mediterráneo, Alcázar de San Juan-Madrid). Otra de las medidas planteadas es la de reclamar la mejora del eje Alcázar de San Juan-La Encina, necesaria para la adecuada conexión de ese tramo con el puerto de Valencia y con el corredor Mediterráneo. A esto se une la necesidad de garantizar que el tramo del corredor Tarragona-Castellón, en el que solo hay previsto ancho de vía europeo, mantenga el ibérico para evitar el tapón que se producirá cuando lleguen los trenes allí y que obligará a desviar las mercancías por Madrid, lo que encarecerá el transporte.

La tercera línea consiste en que todos los operadores de la provincia que intervienen en la logística interactúen. Durante la presentación, Sánchez aseguró que «trata de fortalecer la posición logística de Córdoba» en un momento en el que hay muchos operadores interesados en potenciar el uso del ferrocarril en el Sur, «oportunidad que hay que aprovechar».