Como todo diplomático, Simon Manley, embajador del Reino Unido en España, es un hombre de exquisitos modales y cortesía británica. El pasado lunes llegó en el AVE a Córdoba para la inauguración de las nuevas instalaciones del Colegio Británico de esta ciudad cuando ha cumplido su 20 aniversario. El embajador, casado con la catalana María Isabel Fernández Utges Manley, abogada especializada en propiedad intelectual, competencia y regulación, y con tres hijas, conoce bien España, sus problemas y su convulsa vida política. Muy interesado también en la vida cultural española, aprovechó su visita a Córdoba para conocer el complejo arqueológico de Medina Azahara. Simon Manley fue director de Europa en el Foreign & Commonwealth Office (FCO) desde el 2011 al 2013, asumiendo la responsabilidad de las políticas relativas a la UE, las relaciones bilaterales del Reino Unido con sus socios europeos y una red de asuntos exteriores formada por 57 destinos europeos y más de 2.000 empleados, antes de ser destinado a España. Es historiador y tiene un amplio currículum de destinos de responsabilidad en Europa y EEUU. Desea lograr un acuerdo respecto al Brexit y Gibraltar.

-Ha inaugurado en Córdoba las nuevas instalaciones del Colegio Británico.

-Sí, uno de mis predecesores inauguró este colegio, que empezó con 72 alumnos y ahora cuenta con más de 500 estudiantes y una ampliación importante que refleja el éxito del colegio, que forma parte de la historia de la educación británica en España. Hay casi 55.000 estudiantes en colegios británicos de toda España, es la red más importante de colegios ingleses en Europa, y esto refleja el deseo de los padres españoles de enviar a sus hijos también a las universidades británicas, donde hay más de 12.000 estudiantes españoles. Es una bonita historia de relación entre nuestros pueblos.

-¿Es su primera visita a Córdoba?

-No, la primera vez que vine fue hace casi 20 años, antes del nacimiento de mi hija mayor, porque mi mujer estaba embarazada en aquella época, y volví hace casi dos años, para la temporada de los patios, pues soy gran aficionado a los jardines, y fue impresionante. Vine días después de ser elegido nuestro primer alcalde de Londres musulmán, teniendo en cuenta que esta ciudad es conocida por lugar de encuentro de tres civilizaciones.

-¿Qué le parece la ciudad?

-Es una maravilla, desde su historia, que yo soy historiador, a la ciudad en sí. Es siempre un placer estar aquí.

-Pues vamos a temas más comprometidos. Usted ha presentado en Madrid el ‘Libro blanco para el ‘Brexit’’, que recoge la estrategia del gobierno de Theresa May para la salida de la UE. ¿Cuál es la estrategia o línea fundamental que plantea?

-Salimos de la UE por voluntad de nuestro pueblo, pero no salimos de Europa. Somos, hemos sido y seguiremos siendo europeos. Nos enfrentamos a las mismas amenazas, los mismos retos y queremos una relación lo más estrecha posible con Europa. Nuestra propuesta en el libro blanco es una zona de libre comercio en bienes, incluso en productos agroalimentarios, lo que es importante para Córdoba. Que todos los productos de la provincia de Córdoba que consumamos en el Reino Unido sean sin barreras, sin aranceles, es nuestra ambición. Y también queremos una relación en el ámbito de la seguridad que permite una relación muy estrecha. Mañana (el martes 18) tenemos la visita en Madrid de nuestro ministro de Interior que va a hablar de la importancia de la colaboración que tenemos, como aquí en Andalucía, entre nuestros cuerpos y fuerzas de seguridad. Tercera parte potente, pues hay muchos andaluces que viven y trabajan en el Reino Unido, es que queremos proteger sus derechos, que puedan seguir trabajando, viviendo, visitando nuestro país. Lo mismo que los 300.000 británicos que viven en España, muchos de ellos en Andalucía y en Córdoba, queremos que puedan seguir viviendo como siempre.

-Sin embargo, las negociaciones del ‘Brexit’ han encallado en Bruselas, e incluso se habla de un adelanto electoral u otro referéndum, ¿cómo ve la situación?

-No es una negociación fácil, es la primera vez que un país ha salido de la Unión Europea, y esperamos que sea el último, pero la verdad es que hemos avanzado mucho en las negociaciones, sobre todo en el aspecto de los derechos de los ciudadanos. Pero en otros hemos avanzado menos, sobre todo en la relación que tendremos en el futuro a nivel económico y en el asunto de Irlanda del Norte, que es un asunto clave, pues no queremos volver al pasado de una frontera física entre Irlanda del Norte e Irlanda, pero tampoco queremos una frontera aduanera entre Irlanda del Norte y las otras partes del Reino Unido. Es como si hubiera una frontera entre Andalucía y Castilla-La Mancha, por ejemplo, eso es imposible para cualquier gobierno británico. Entonces, tenemos que encontrar soluciones, esperamos que nuestros socios europeos estudien más nuestra propuesta, que intenta encontrar solución a corto plazo a este reto. Tenemos un plan en caso de que no haya acuerdo, pero lo más importante es que queremos un acuerdo con nuestros socios europeos.

-¿Cómo nos va a afectar el Brexit a los españoles? ¿Qué incidencia tendrá en el turismo?

-Nuestra prioridad, y también la del Gobierno español, han sido los ciudadanos. Por esto, en la cumbre europea de diciembre y marzo hubo acuerdos importantes para los ciudadanos, pero entiendo muy bien la preocupación no solo de los españoles que viven en nuestro país, sino también la de los británicos que viven en Andalucía. Theresa May ha declarado que, haya o no acuerdo, vamos a proteger los derechos de los europeos que viven en nuestro país, que estamos orgullosos de su presencia y de su influencia en nuestra economía y sociedad, y esperamos que no haya barreras para los británicos que quieran vivir aquí o visitar España. El año pasado hubo casi 19 millones de visitas de británicos a España, que forman parte muy importante de la industria del turismo de este país.

-¿Es Córdoba una ciudad atractiva para residentes británicos?

-Bueno, las poblaciones británicas más importantes en Andalucía están en la provincia de Málaga, en toda la Costa del Sol y en el interior. En los últimos dos años hemos atendido a esos ciudadanos con casi 200 foros en toda España, escuchando sus preocupaciones, aprendiendo lo que deben ser los asuntos que tratamos en las negociaciones con la UE, ya sea a nivel de residencia, de acceso a la sanidad o incluso de sus mascotas.

-Las exportaciones de Córdoba al Reino Unido son también importantes, es el octavo país al que más exportó la provincia en el 2017, con un total de 75 millones, ¿se pueden ver afectadas estas exportaciones?

-Nuestra propuesta es que no haya aranceles ni barreras al comercio en productos agroalimentarios, que es clave en Andalucía, pero ahí no hemos avanzado lo suficiente en las negociaciones con la UE. Creo que es importante que escuchemos todos los gobiernos la voz de los empresarios, a la empresa. Somos un país que cree en el poder del libre comercio, no solo de las exportaciones sino también de las importaciones. Una economía abierta a las importaciones es más competitiva y al final más rica.

-¿Qué preocupaciones le manifiestan los empresarios españoles?

-Hemos estado mucho tiempo en reuniones no solo con nuestros inversores españoles, sobre todo de los sectores más importantes de exportaciones a nuestro país como el agroalimentario, la automoción... y escuchamos sus preocupaciones. Todos quieren el comercio más libre posible entre nuestro país y la Unión Europea.

-Hay otro problema espinoso, que es Gibraltar. ¿Cree que es el momento de negociar un cambio en las condiciones del Peñón?

-Estamos trabajando muy estrechamente no solo con el Gobierno de España sin también con el gobierno de Gibraltar. Trabajando los tres para ver cómo podemos tratar nuestra salida de la UE, pero sobre todo a nivel de los ciudadanos, de los trabajadores que viven en España y trabajan en Gibraltar, 8.000 de ellos andaluces, de La Línea, San Roque. Y tratamos de lograr un acuerdo que garantice sus derechos a seguir trabajando, que tengan fluidez en la frontera, pero también aprovechar este momento para ver si podemos lograr un acuerdo entre los tres y dar impulso a una relación más estrecha, más positiva, tanto en el ámbito de seguridad, de medio ambiente… Seguimos trabajando juntos en ese sentido. Somos optimistas, pues hay buena voluntad por parte de nuestro gobierno, también del de Fabián Picardo, de lograr acuerdos entre todos.

-¿Cómo vive un embajador británico la convulsa vida política en que se encuentra España?

-Con mucho interés. Creo que es muy interesante ver los cambios políticos en España y estamos intentando intensificar nuestros contactos con el nuevo Gobierno porque tenemos dos visitas esta semana, una de nuestro ministro de Interior y otra del presidente de los lores británicos. También estamos organizando las tertulias británicas, que es una reunión anual de ministros de los dos gobiernos y políticos de partidos diversos -vienen miembros del partido laborista-, y también de empresarios, escritores… y este año tendrá lugar en Málaga a finales de octubre. Va a ser un encuentro muy importante este año con el nuevo Gobierno de España.

-Su mujer es catalana ¿no?

-Es catalana, española y europea.

-¿Y cómo se ve desde el Reino Unido la situación de Cataluña?

-A veces con sensación de tristeza, pero creo que nuestra posición ha sido muy clara desde el inicio. Creemos que, como socio y amigo de España, que todos tienen que respetar la ley, el Estado de derecho y la Constitución, tan querida por los españoles y que ha sido tan importante en este magnífico proceso de Transición de los últimos 40 años. Este mes de diciembre celebramos con los españoles la Constitución española y el éxito de la Transición.

-¿Qué le diría a los jóvenes cordobeses que quieren ir a trabajar al Reino Unido? ¿Tendrán oportunidades?

-Serán bienvenidos todos, para estudiar, para trabajar... Estamos orgullosos de la presencia de tantos cordobeses, de tantos andaluces, tantos españoles, en nuestra sociedad, de verdad, porque contribuyen a una sociedad multicultural y diversa. No hay una sociedad más cosmopolita en el mundo en estos momentos que Londres. Pero hay cordobeses y andaluces en otros puntos de nuestro país, en Manchester, en Bristol, en Edimburgo… Tenemos un nivel de paro de menos del 5%, hay una demanda importante de las empresas del talento, buscamos el talento de todos, sea en las empresas o en las universidades. Nuestro país es y será un país de oportunidades para los jóvenes y los empresarios.

-Respecto a la inmigración, en España tenemos un problema importante, sobre todo en Ceuta y Melilla, ¿qué apoyo da el Reino Unido?

-Creo que la inmigración es uno de los asuntos más importantes de toda Europa y creo que compartimos la idea de que tenemos que tratar el problema en su conjunto, no solo las consecuencias, no solo las llegadas de inmigrantes a las costas del Estrecho de Gibraltar. Tenemos que trabajar, como lo ha hecho España en los últimos 15 años, con los países de origen y de tránsito en África, con proyectos de desarrollo, dar les más oportunidades a los jóvenes africanos en sus propios países. Compartimos esta visión con el Gobierno español, de tratar el problema a fondo, que es de desarrollo económico en los países de origen.

-Sí, eso se sabe, pero la percepción es que no se concreta nada y la crisis humanitaria es muy importante.

- Yo creo que España ha mostrado a sus socios europeos en los últimos años el camino, con su colaboración con los países del África occidental, y tenemos que desarrollar una política europea que refleje un poco esta política española. España es un buen ejemplo de las posibilidades de cooperación estrecha y positiva con nuestros socios africanos en este asunto.