La empresa cordobesa Caracol Tours ha empezado a comercializar un paquete turístico que quiere colocar a Córdoba como destino preferente dentro del sector nupcial y entre las parejas japonesas, una idea que ya ha sido acogida con éxito en la Feria Internacional de Turismo de Jata, en Tokio.

La gerente de Caracol Tours, Isabel Calvache, explica a Efe desde Japón la importancia que tiene el llamado sector 'wedding' en el país nipón, donde el matrimonio es una institución importantísima y una industria próspera que busca para los contrayentes nociones como exotismo, lujo y exclusividad.

Todo ello lo tienen, sumado al valor patrimonial, en una ciudad como Córdoba, a la que en Japón ven con muy buenos ojos y donde han tomado nota de su peculiaridad al ser una de las más laureadas del mundo en lo que respecta a títulos de Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.

Córdoba es también, según Calvache, "Hana No Machi, la ciudad de la flor“, una peculiaridad que la conecta perfectamente con los japoneses, amantes del "hanami", tradición de observar la belleza de las flores.

Por eso, parte primordial de este novedoso paquete turístico serán los patios de Córdoba, escenario de la ceremonia nupcial y también del posterior foto-reportaje, un extra que cotiza al alza en Japón.

EL CASTILLO DE ALMODÓVAR

Además, el Castillo de Almodóvar y el Palacio de Puerto Carrero (Palma del Río) son también parte de esta oferta como emplazamientos en los que oficiar el rito, al tiempo que el posterior foto-reportaje se moverá por los puntos patrimoniales de la ciudad, desde la Mezquita a Medina Azahara, pasando por el casco histórico y de nuevo los patios.

Las bodas en Japón son un pequeño mundo, cuyo rito principal es el "sintoista", un tipo de ceremonia tradicional, aunque en los últimos años lo que está creciendo son las ceremonias al estilo occidental y, particularmente, el viaje al extranjero para casarse con una pequeña ceremonia.

En este sentido, Calvache aclara que, en realidad, lo que suceda en Córdoba no se trata de una boda oficial sino de una ceremonia privada entre la pareja y un máximo de diez personas.

"Las parejas vendrán ya casadas de Japón", señala la gerente de Caracol Tours, que añade que el la importancia está en que se llevarán de Córdoba un recuerdo imborrable y un puñado de imágenes que serán la envidia de sus amigos y conocidos.

La gerente de esta compañía conoce bien Japón, pues ha vivido allí durante varios años, y lleva casi un lustro especializada en este tipo de turismo, que gusta de visitar la ciudad de forma pausada, recreándose en los detalles.

Por lo tanto, la temporada de boda japonesa tendrán lugar o bien en la primavera para disfrutar del esplendor del "hanami cordobés", o bien en otoño porque otro de los activos que ha seducido a los operadores y empresarios nupciales japoneses con los que ha contactado ha sido el Festival de las Flores, Flora, que se celebra en octubre.

“La presentación del producto ha sido brutal”, señala Calvache, que añade que ya han comenzado las negociaciones con las empresas del sector para la explotación del mismo, que, como manda la tradición japonesa, llevarán un tiempo hasta concretarse.

No obstante, en unas semanas comenzarán a grabar un publirreportaje del producto para comenzar la promoción con la idea de que en la primavera o el otoño del año próximo Córdoba sea un destino nupcial preferente para las bodas japonesas.