El primer teniente alcalde de Turismo del Ayuntamiento de Córdoba, Pedro García, y el presidente del Aula del Vino, Manuel López Alejandre, presentaron ayer el 24º Concurso Ibérico de Vinos Premios Mezquita, que tendrá lugar el lunes en el hotel Eurostars Palace. En esta cita, compiten por el galardón 350 vinos de España y Portugal, que serán evaluados por un cualificado jurado formado por 35 personas provenientes de Suiza, Francia, Portugal y España. «Hay, además, un buen equipo de sumillers y enólogos de Córdoba», indicó López-Alejandre, que añadió que el jurado es «enormemente duro y exigente», algo que contribuye al prestigio de estos galardones.

Los Premios Mezquita, que este año se dedican a la aspiración de que Medina Azahara sea designada por Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, se entregarán el próximo mes de junio, aunque los resultados se conocerán a finales de la próxima semana. Entre las novedades de este año, está la introducción del vermut, un vino que «ha tenido muchos baches, pero vuelve a estar de moda». Además se premiarán los mejores vinos tintos, blancos, rosados, de aguja, espumosos de método tradicional, generosos, dulces y kosher (para judíos con el método de la Torá). Asimismo, un año más se elegirá «el vestido» más elegante, que será elegido por el modisto Elio Berhanyer.

CRÍTICAS A LA CATA // Manuel López-Alejandre, exsecretario de la Denominación de Origen Montilla-Moriles y uno de los padres de la Cata del Vino, criticó ayer este evento al compararlo con la Cata de Otoño (que se celebrará entre los días 26 y 28 de octubre en Caballerizas Reales y cumple siete años). Aunque indicó que su afán no es criticar ni ofender, López-Alejandre afirmó que «para ir a catar vinos es mucho mejor la cata de octubre en las Caballerizas Reales. Allí no hay música, pisotones o colas para el que vaya a catar», dijo, al tiempo que recordó que durante una época en la Cata del Vino, que él impulsó, «no había ni colas ni taquillas».