Medio centenar de mujeres afectadas en Córdoba por el método anticonceptivo Essure, ya retirado por el fabricante en la UE, participaron ayer en una jornada divulgativa y de consulta jurídica sobre su situación, un encuentro de la plataforma Libres de Essure celebrado en el hotel Córdoba Center. En el mismo, el abogado Cipriano Castreje dio cuenta de la firme voluntad de las 400 afectadas en Córdoba (la plataforma cuenta con 1.500 en toda España) de «ir hasta el final» en una lucha jurídica para que se le «haga justicia» por el daño físico, psicológico y moral que han sufrido, según las afectadas, a consecuencia del método anticonceptivo o al pedir retirarlo.

Castreje, del despacho coruñés Castreje & Co Abogados, especializado en reclamaciones por daños médicos y farmacéuticos y que se dio a conocer al liderar las demandas en la catástrofe del Prestige, detalló que por ahora todas las acciones jurídicas de la plataforma a nivel nacional están «en fase de estudio», con peticiones y recogida de historiales y datos, valoración de los daños e informes periciales. Más adelante, las acciones legales se encaminarán a la responsabilidad que pueda hallarse en la Administración sanitaria, el fabricante y el distribuidor y «otros implicados, ya sea en la sanidad pública o privada», aunque «nuestra intención es llegar a un arbitraje en donde, junto a un acuerdo, se pida perdón a las afectadas que en ocasiones han sido humilladas, mal atendidas y hasta vejadas».

En Córdoba, que fue pionera en la implantación de este método anticonceptivo, se estima que a unas 8.000 mujeres hasta el 2015 se les implantó este mecanismo que bloquea las trompas de falopio, y al que después se le achacó problemas como hemorragias, infecciones o patologías autoinmunes, desvelándose también muchas complicaciones a la hora de reclamar la retirada del dispositivo.