«Las personas que están acostumbradas sí toman miel, pero hay niños que ni la conocen», afirmó ayer José de Miguel, gerente de la firma Santa María de Trassierra, que está participando en Expomiel en el Palacio de la Merced. Con estas declaraciones confirmó la necesidad de continuar promocionando el producto, precisamente en una jornada en la que la muestra recibió la visita de colegios. Este ganadero apuntó la polinización, la miel, la cera, el veneno («que se utiliza en farmacia», aclaró) y los propóleos (sobre los que comentó que son una sustancia bactericida que recogen de los árboles) como los productos que se obtienen de las abejas. En referencia a la producción, también afirmó que «la situación ha empeorado por las condiciones del campo, por el uso de fitosanitarios y semillas de corto ciclo».

En otro stand se encontraba Josefa Madueño, gerente de Miel Sierra de Montoro, que comentó que en Expomiel «se encuentran todos los tipos de mieles» y que «la gente acude a comprar para todo el año». En su caso, tienen 1.500 colmenas «y más demanda que producción», y por esto no acuden a más ferias.

Además de miel, los asistentes a este evento pueden encontrar otros artículos relacionados con las abejas como cosmética, jabones, velas, cuentos e incluso juguetes.