La historia se repite. El debate sobre si peatonalizar o semipeatonalizar se produjo con la calle Cruz Conde y ahora se abre con Capitulares un mes después del anuncio del delegado de Movilidad, Andrés Pino, de que lo más probable es que esta vía se quede sin ningún tipo de tráfico cuando acaben las obras. La peatonalización de Capitulares vuelve a enfrentar a comerciantes y vecinos. A pesar de que en un primer momento había una posición prácticamente unánime a favor de la peatonalización, esta semana el Consejo del Movimiento Ciudadano se ha pronunciado apoyando la semipeatonalización y reclamando que se permita el paso por la calle Capitulares a residentes y taxis.

En cambio, el vicepresidente de la Federación Comercio Córdoba, Manuel Blasco, asegura que espera que el Consejo de Movimiento Ciudadano abandone «la demagogia en sus pronunciamientos».

Blasco reconoce que «se empieza a vislumbrar un escenario muy parecido al de la peatonalización de Cruz Conde, donde los vecinos ya se opusieron desde el inicio» y ahora «repiten con Capitulares».

A pesar de aquella polémica, afirma que «no habrá ningún ciudadano en la ciudad de Córdoba a día de hoy que pida la circulación de vehículos por Cruz Conde», ya que «todas las actuaciones de peatonalización han sido un gran éxito».

Concluye que si los representantes vecinales «quieren atacar un modelo de convivencia que se demostró válido en Cruz Conde, no pueden contar con nosotros».

Por su parte, la alcaldesa, Isabel Ambrosio, no ha concretado qué pasará con Capitulares, ya que primero cree que es mejor esperar a que acabe la obra y «tomar las decisiones que de alguna manera respeten el proyecto inicial y lo que perseguía con las necesidades que tienen los vecinos». Ambrosio se muestra «convencida de que vamos a buscar soluciones para todo». Por su parte, el concejal de Movilidad reitera que la decisión definitiva se tomará a finales de febrero cuando acaben los trabajos.