El plan especial de la Sierra es un documento urbanístico que echó a andar hace más de diez años, en el 2005, y que quedó parado hace más de cinco, en mayo del 2011, momento en el que la Junta de Gobierno Local dio por resueltas las 17 alegaciones presentadas. Desde entonces, y según ha explicado el presidente de Urbanismo, Pedro García, quedó encerrado "en un cajón", hasta ahora, que se va a retomar. De hecho, y tal y como ha indicado el gerente de Urbanismo, Emilio García, el organismo municipal y la Universidad de Córdoba llevan ya un tiempo trabajando en ello.

El plan contemplaba once medidas de todo tipo valoradas en 40 millones de euros. Ahora, una vez que se reanude la tramitación, que seguirá con la aprobación provisional, las iniciativas podrán ser más o menos o "pueden ser modificadas", según ha señalado Pedro García. El objetivo fundamental de este documento es "la protección y la puesta en valor" de la Sierra. Dentro de los distintos ámbitos del plan, hay "previstas actividades deportivas, lúdicas o hosteleras", destaca el catedrático José Roldán Cañas.

Una de las cuestiones censuradas durante la tramitación inicial del plan, es que este no resolvía la situación de las 24 urbanizaciones ilegales de la Sierra. En este sentido, y según ha explicado el gerente, la idea es abordar esa realidad "de forma paralela", teniendo en cuenta las novedades normativas que ha habido desde que el documento fue aprobado de forma inicial.