Las siete personas detenidas por, presuntamente, comprar y vender aceituna robada en Córdoba han sido puestas en libertad con cargos, según afirmaron ayer fuentes próximas a la investigación a este periódico. Por el momento, no ha trascendido mucha información aunque desde el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía indicaron que tres de ellas --que podrían ser el gerente y los dos propietarios de una almazara de la capital-- han sido imputadas por un supuesto delito de receptación y su causa está siendo investigada por el juzgado de Instrucción número 4 de Córdoba.

Estas mismas fuentes señalaron que el juez acordó para ellos, que, al parecer, son españoles, la libertad provisional sin medidas cautelares y la citada imputación por la compra de aceituna robada. De otro lado, este periódico ha podido conocer que también han quedado en libertad con cargos las otras cuatro personas que fueron detenidas por la Guardia Civil en el marco de la operación Almazara por, presuntamente, sustraer aceitunas en explotaciones agrícolas y venderlas a la empresa investigada. Esta actuación ha sido desarrollada durante meses por el equipo Roca y continúa abierta, por lo que no se descarta que se puedan esclarecer otros hechos delictivos en la provincia.

El presidente de la Asociación de Jóvenes Agricultores (Asaja), Ignacio Fernández de Mesa, insistió ayer en destacar, a través de un comunicado, la labor de este cuerpo de seguridad e hizo hincapié en que los olivareros están, a su juicio, en situación de indefensión, desprotegidos ante los numerosos robos que sufren sus explotaciones por la falta de medidas adecuadas de protección por parte de los poderes públicos, que tienen encomendadas las funciones de vigilancia y protección. A esto añadió que "las medidas que han sido adoptadas no surten los efectos perseguidos frente a la defensa de la propiedad privada".

La Guardia Civil informó el domingo pasado de que había detenido a los dos propietarios y el gerente de una almazara por los supuestos delitos de receptación, falsedad documental y blanqueo de capitales, así como a otras cuatro personas, vecinas de Córdoba, por colaborar en esta actividad ilícita con la venta de frutos sustraídos. Sus estimaciones apuntan que en la actual campaña de la aceituna esta almazara habría recibido más de 100 toneladas de procedencia irregular, mientras que en la cosecha anterior la cifra se situaría en más de 80 toneladas. Además, el beneficio habría ascendido a 80.000 euros en los dos últimos años.