La remodelación de la calle Caño se hará en dos fases

Una de las iniciativas incluidas en el plan 50 obras en 50 barrios , la remodelación de la calle Caño, empieza ya y también debe estar acabada antes de fin de año, aunque en este caso su plazo de ejecución en menor. Desde hoy, y hasta el 18 de noviembre, la calle estará cortada al tráfico para llevar a cabo los trabajos. Para ello, el departamento de Movilidad ha diseñado un plan de tráfico que ha dividido en dos fases. En un primer momento, desde hoy y hasta el 3 de noviembre, se cortará el tramo que hay entre Manuel María de Arjona y plaza Chirinos. Después, entre el 4 y el 18 de noviembre, se restringirá entre Ronda de Los Tejares y Manuel María de Arjona.

Durante la primera fase, los vehículos podrán acceder a la calle Caño, pero solo hasta Manuel María de Arjona, para salir después por Osario. Los residentes y usuarios de cocheras de Chirinos, Los Carrillos, Osario, Ramírez de Arellano, San Miguel y San Alvaro podrán entrar desde Colón por Torres Cabrera y continuar por Domingo Muñoz, a la que, por sus dimensiones, no podrán entrar vehículos de un ancho superior a 1,9, que tendrán que pedir permiso especial para acceder desde Las Tendillas. La carga y descarga se mantendrá al inicio de la calle Caño y los vehículos llegarán a las cocheras por un lateral. Durante la segunda fase ya no se podrá llegar a la calle Caño desde Ronda de Los Tejares, pero las medidas de tráfico serán las mismas que en la primera. Además, a las cocheras de la calle Caño también se podrá acceder por Domingo Muñoz.

La empresa Helopav será la encargada de llevar a cabo esta reforma, adjudicada por 78.187 euros, presupuesto que es un 25% inferior al de licitación (104.139 euros). La empresa también ha reducido un mes el plazo de ejecución, que estaba fijado en tres y se queda en dos.

La calle tiene una calzada de anchura variable --4,80 y 5,80 metros--, con aparcamientos en línea en su margen izquierda, aceras de entre 0,80 y 1,60 metros y una calzada muy deteriorada. El proyecto contempla un carril único de 2,90 y de 3,30 y aparcamientos en línea para carga y descarga y en batería para motos. Además, el acerado se renovará y ensanchará, quedándose con una anchura mínima de 1,50.