Unidad sindical y protestas para pedir la reforma de la comisaría

Por primera vez, los cuatros sindicatos que representan a los más de 800 miembros de la Policía Nacional en Córdoba (SUP, CEP, UFP y SPP) se han unido para protestar por el "lamentable" estado de la comisaría Madre de Dios, reclamar su reforma y denunciar que el Gobierno "ha incumplido" su promesa de dedicar tres millones de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) a remodelar las actuales instalaciones.

Fernando Ramón Calderón, portavoz de la plataforma activada bajo el nombre de Policía en Conflicto, explicó ayer que fue el antiguo comisario y actual diputado popular en el Congreso Federico Cabello de Alba quien le transmitió en una reunión en la sede del PP la "promesa" de que se iban a dedicar tres millones de euros a reformar la comisaría, algo que posteriormente "ratificaron" el director general de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó; el ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, y recientemente el subdelegado del Gobierno, Juan José Primo Jurado. Sin embargo, cuando "creíamos que íbamos a acabar con el infierno que estamos sufriendo en Campo Madre de Dios, hemos descubierto que todo es mentira". Ante esto, la plataforma sindical ha dispuesto un calendario de protestas que comenzarán el 6 de octubre ante la Subdelegación del Gobierno y que tendrán continuidad con otras que se celebrarán hasta diciembre ante la propia comisaría, en la plaza de Las Tres Culturas y bajo la bandera de España situada en los Llanos del Pretorio.

Calderón, quien aseguró que las protestas no van contra ningún partido, sino "en contra de quienes nos hicieron creer una quimera", apuntó también que "nos hubiera gustado" que, como en Jerez, en Córdoba "se hubiera volcado nuestro alcalde". "Allí lo hizo la alcaldesa y van a tener una nueva comisaría, pero aquí (José Antonio) Nieto nunca nos dijo nada", añadió. Además, insistió en que las mejoras que reclaman en las instalaciones de la comisaría no solo son para beneficio de los policías, "sino también para los ciudadanos que acuden a presentar una denuncia o para los propios detenidos".

Entre las deficiencias de la comisaría, Calderón señaló que una parte del muro perimetral "está grapado"; que este verano, durante la ola de calor, no funcionaba el aire acondicionado; que la instalación eléctrica es insuficiente y "salta cuando se conectan muchos aparatos"; que hay duchas unisex, y que ha habido hasta una plaga de chinches. "Campo Madre de Dios es una ruina; su contenido y su continente es penoso", resumió el portavoz de la plataforma policial.