La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG) confirmó ayer que el mejillón cebra, una de las especies invasoras más problemáticas para su erradicación y que provoca cuantiosos daños en canales de riego y en otras infraestructuras de regadío, ha rebasado ya los niveles del embalse de Iznájar y se encuentra en la zona regable del Genil-Cabra. A esta especie invasora hay que unir también otras como los briozoos, que también colapsan los canales de riego. Ante esta problemática, el presidente de la CHG, Manuel Romero, precisó que se contempla una inversión de 4,5 millones de euros para hacer frente a las especies exóticas invasoras.

Precisamente, la Federación de Comunidades de Regantes del Guadalquivir (Feragua) demandó ayer que se destinen fondos para frenar el impacto de las especies invasoras. El máximo responsable de la CHG, advirtió de la preocupación de las administraciones por erradicar esta problemática, "que constituye una de las principales causas de afección ecológica y económica para los usuarios de la demarcación". Romero reconoció que ya se han comenzado a tomar medidas contra el mejillón cebra, la especie exótica "más preocupante por su rápida expansión". Para ello, la Confederación ha creado un grupo de trabajo, junto a usuarios y administraciones implicadas, además de firmar un convenio con la Diputación de Córdoba para el control de esta especie, localizada en Iznájar en el 2011.