Cómo saber que una persona no puede desconectar de su trabajo es relativamente fácil. El que no deja de pensar en todo el día en la empresa, si permanentemente mira el móvil pendiente de llamadas, watssaps y emails o si constantemente llama para ver cómo se encuentra todo es quien va a tener más problemas de desconectar de su ocupación habitual.

La psicóloga Gema Delgado considera que "la irrupción de las nuevas tecnologías ha hecho que estemos muy alerta a todo, además de que cualquiera puede contactar contigo rápidamente".

Por otro lado, Delgado considera que "nos sentimos comprometidos a contestar, además de que la curiosidad nos mata y necesitamos saber de todo constantemente", por eso la primera pauta a seguir es "ponerse una hora al día para conectar el teléfono e intentar evitarlo el resto de la jornada"

CONSECUENCIAS "Los estresores son múltiples, tanto a nivel laboral como familiar, y si no se desconecta y se continúa con el mismo nivel de estrés a la vuelta del trabajo merman la creatividad, la capacidad de reacción y la motivación por el trabajo", lo que provoca "sentirse menos feliz y terminar agotado (todo esto conocido por la expresión estar quemado )", continúa Delgado. Por lo tanto, el objetivo de las vacaciones debe ser darle descanso a nuestro cuerpo y a nuestra mente, sobre todo a esta última. Y, por supuesto, hay intentar hacer aquellas cosas que queremos hacer y no podemos cuando estamos trabajando, según concluye la experta.