El ministerio fiscal ha solicitado un año y nueve meses de prisión por un delito de lesiones para cada uno de los dos vigilantes jurados de un club acusados de dar una paliza a un cliente que los insultó. Para este, además, pide una multa de 100 euros por una falta de vejaciones.

Según el escrito del fiscal, los hechos ocurrieron a las cuatro de la mañana del 7 de julio del 2007, cuando el cliente insultó a los vigilantes y les dijo que les iba a "partir la cara" por no dejarle abandonar el local con un vaso en la mano. Entonces, lo echaron a empujones y en el aparcamiento le propinaron patadas, puñetazos y lo agredieron con las porras.